En el sur de la Bahía de Acapulco se encuentra la famosa Playa Revolcadero, una amplia franja de arena dorada enmarcada por una hilera de palmeras.

Un par de metros tierra adentro se encuentra una enorme laguna tropical alrededor de la cual se asientan los hoteles Quinta Real y Mayan Resorts y el campo Tres Vidas Golf Course, además de otros condominios de lujo. Éste es un verdadero paraíso de playa; quienes busquen relajarse hallarán un bello paisaje frente a sus ojos, y los practicantes de surf encontrarán aquí grandes olas. Otros hoteles que se han establecido en la zona son el Fairmont Acapulco Princess, que es en sí mismo un atractivo turístico, y el Fairmont Pierre Marqués. Otro hotel digno de visitar es el Mayan Resorts, cuyas instalaciones cuentan con canales, albercas y una atractiva decoración de influencia maya.

Entre la Bahía de Acapulco y el aeropuerto se encuentra Puerto Marqués. Durante muchos años, esta bahía pasó inadvertida para los desarrolladores de proyectos inmobiliarios. Ahora alberga el exclusivo Acapulco Diamante Resort y un extenso desarrollo residencial. Sin embargo, la zona mantiene su carácter rústico playero. Al ser una bahía más pequeña que la de Acapulco, Puerto Marqués pasa inadvertido frente a su avasalladora vecina. Pero las cosas están cambiando: el desarrollo Punta Diamante, que abarca esta bahía y la península adyacente, atrae cada vez más visitantes. Los atractivos de Puerto Marqués cada vez gozan de mayor popularidad; más visitantes acuden para relajarse en sus playas y saborear los platillos de los restaurantes establecidos en la costa.

La espectacular Bahía de Acapulco está rodeada por montañas. Su belleza rivaliza con la de otros destinos de renombre mundial, como Río de Janeiro y Hong Kong. La Autopista del Sol desciende de las montañas para convertirse en la costera Miguel Alemán, la cual bordea las playas de la bahía de punta a punta. Ahí se encuentran el corazón de la zona hotelera, los resorts de primer nivel, restaurantes exclusivos, tiendas y lo mejor de la vida nocturna. Después, la costera se interna en la renovada zona del centro de la ciudad para perderse en el corazón del viejo Acapulco.