Desde antes de arribar a Boca de Chila, la mirada se colma con hermosas vistas del campo: plantaciones de mango y sandía, estructuras de metal donde los campesinos ponen a secar las grandes hojas de tabaco y tractores deambulando por la fértil tierra nayarita, preparando la cosecha siguiente. Tras concluir con estos bucólicos paisajes, en los cuales no es extraño descubrir bellas playas con un oleaje azul intenso, las cuales nos permiten admirar algunas de las más bellas puestas de sol del Pacífico Mexicano.

Por fin estamos en Boca de Chila, lugar turístico de tibias aguas y tropical clima que se ha posicionado con el paso del tiempo en uno de los destinos promisorios de la Riviera Nayarit. ¡Qué maravilloso lugar! Tiene aproximadamente 7.5 kilómetros de playa de arena suave y vegetación exuberante y es el marco ideal para un moderno desarrollo turístico que ofrece a los visitantes exclusivos hoteles, excelentes campos de golf, restaurantes y todo lo indispensable para tener las mejores vacaciones.

En Boca de Chila, lugar ampliamente valorado por los aficionados al surfing, han sido hallados ancestrales petroglifos que en la actualidad pueden admirarse en la comunidad de Zacoalpan, localizada a ocho kilómetros de Boca de Chila. Área de manglares donde tienen su hábitat distintas aves acuáticas y subacuáticas, este rincón costero nayarita brinda a los aventureros una vivencia inigualable, en especial en términos ecoturísticos. Para fines de alojamiento también se puede aprovechar los hoteles ubicados en Chacala, Guayabitos y Punta de Mita.

En Chila tenemos la tercera playa más importante para la anidación de las tortugas marinas en el entorno de las costas de Nayarit. Los visitantes hallarán en esta playa un paisaje marino solitario y casi virgen, dotado de un hechizo silvestre difícil de olvidar. Es un destino para olvidarse de las preocupaciones de la vida cotidiana- en especial las que se viven en las grandes ciudades- y entregarse a la más completa relajación y descanso.

Ahora bien, un lugar que puede visitarse de manera complementaria a Boca de Chila es la ciudad de Tepic, capital del Estado de Nayarit. Se trata de una urbe que cuenta con una gran tradición culinaria, con ricos platillos como pozole, tostadas, enchiladas, pozole, quesadillas de frijol al estilo nayarita y muchos más. No obstante, acaso el platillo más recomendable de la cocina local sean los bollos de plátano, es decir, porciones de plátano molido que se combinan con huevo y se sirven con plátano en rodajas y hojas de lechuga. Y todo lo anterior se acompaña de una salsa preparada con queso rallado, jitomate y cebolla bien picada. No menos delicioso es el pescado zarandeado, una de las creaciones maestras de la gastronomía mexcalteca y que también ofrece a los visitantes gratos descubrimientos culinarios como las empanadas, albóndigas, sopes de ostión, pescado tatemado, birria de cabrito, ceviche de pescado, chimichangas de ostión, caldo espeso de camarín y pollo estilo Ixtlán, entre otras más.

Chila en cierto sentido no es un destino turístico sin más, sino que cuenta con la sugestiva cualidad de servir de entrada a muchos de los atractivos más destacados de las costas nayaritas. Los visitantes quedan fascinados con su belleza silvestre, el clima privilegiado con el que cuenta, la cordialidad de los lugareños y tantos rincones mágicos y poco conocidos con los que cuenta. El Pacífico Mexicano suele regalarnos inusuales parajes de gran pureza silvestre, con ambientes costeros que parecen extraídos de la más paradisiaca fantasía. Justamente ese es el caso de Boca de Chila, estupenda playa donde los turistas mexicanos y foráneos hallarán diversión y descanso a manos llenas.