El complejo vacacional San Alfonso del Mar, situado a 90 kilómetros de Santiago en Algarrobo, posee una de las instalaciones más impresionantes donde hacerse un largo puede dejarte sin aliento.
La piscina sorprende por su color turquesa transparente, incluso más que las del Océano pacífico, junto al que se encuentra. La laguna artificial está separada del mar por una playa de arena. Tiene exactamente 1.013 metros de largo y 3 de profundidad, ocupando una superficie de 8 hectáreas y embalsando 250 millones de litros de agua.
Su singularidad ha sido reconocida por el Libro Guinness de los récords. Pero además de su tamaño, esta piscina se caracteriza también por la calidad de sus aguas de un color, típica de los mares tropicales.
Además, otra de sus características es la temperatura del agua, ya que está climatizada y supera en algunas zonas en nueve grados la temperatura del mar.