Los aquaeróbics o aeróbicos acuáticos integran una disciplina deportiva que mezcla los aspectos más positivos de los ejercicios aeróbicos y de la natación.
Esta forma de acondicionamiento físico debe de realizarse en agua templada, puesto que, si esta última tiene una temperatura muy elevada, puede ocasionar mareos y fatiga en los deportistas. En cambio si el agua está muy fría, ello puede derivar en molestias respiratorias. Si no se practican con la orientación necesaria y en el lugar correcto, los aquaeróbics pueden ocasionar daños en la columna vertebral y las articulaciones. Por eso es tan importante que los rebotes, giros y saltos se efectúen con la técnica correcta y la intensidad debida.
Para que los ejercicios aeróbicos no sean tan desgastantes se intentó practicarlos en un medio acuático y de esta manera apareció la disciplina de los aquaeróbics. Fue una estrategia pensada para evitar daños a los tobillos, las caderas y las rodillas. No obstante, los aquaeróbics no deben ser comprenderse como ejercicios aeróbicos convencionales desarrollados en una alberca, sin más. Se trata de una modalidad deportiva que va mucho más allá de ello: implica saber mantenerse a flote, desplazarse de manera ágil y efectiva sobre la superficie, estirar los músculos del cuerpo, auxiliándose con las paredes de la alberca; o bien, sumergirse correctamente en el agua.
Tal y como sucede en el caso de los aeróbicos convencionales, para practicar los aquaeróbics se utilizan diversos complementos, como por ejemplo, cilindros de gomaespuma que tienen resistencia al hundimiento, tobilleras, manoplas elaboradas con neopreno, mancuernas y varios más.
Por lo que se refiere a los beneficios físicos, se ha comprobado que los aquaeróbics pueden ser aún más provechosos que la natación sin más, por el hecho de que, buena parte de las personas que practican la natación carecen de la capacidad para manejar un estilo adecuado, en lo que se refiere a la intensidad y la duración de sus desplazamientos. Aunado a lo anterior hay que considerar que la repetición de los mismos movimientos sobre carga ciertos músculos y por último, no es un deporte que pueda considerarse como sociable.
De tal manera que, en las sesiones de aquaeróbics se trabaja colectivamente a través de variados ejercicios y de una extensa variedad, los cuales pueden ser practicados por cualquier persona. Es claro que la práctica de los aquaeróbics deriva en muchos aspectos positivos tanto para el cuerpo como para la mente.