Hablar de Bloody Bay es hacerlo acerca de uno de los lugares más encantadores de Jamaica.
Las Antillas integran un imán turístico irresistible para los viajeros de todo el orbe, por las condiciones privilegiadas de su naturaleza tropical. Jamaica descuella en este marco, por los muchos sitios interesantes que tiene. Bloody Bay es uno de ellos.
Localizada en el área de Negril, Bloody Bay ha compartido el gran impulso turístico que ha experimentado esta región jamaiquina. El norte de la isla es un caudal de satisfacciones viajeras y la bahía que les recomendamos da fe de ello, plenamente. De acuerdo a ciertas fuentes históricas, hace mucho tiempo Negril servía como un faro para guiar a las embarcaciones en la costa oeste, en sus rutas de navegación.
Paulatinamente Negril fue ganado terreno como destino vacacional y entonces llegaron viajeros procedentes del extranjero y no solo el turismo local. Por ello, se amplió notablemente su oferta de servicios y atractivos. El nombre que tiene es bastante singular: Bloody Bay quiere decir, en español “Bahía Sangrienta”. Lo que sucede es que antiguamente allí se sacrificaba a las ballenas. Es un destino famoso en el Caribe, no solo por tener varias playas llenas de exotismo, vastas, y coloridas, sino además, por sus atracciones ecoturísticas, que incluyen acantilados y cuevas para explorar.
Por si fuera poco, en sus paradisiacas playas se permite practicar el nudismo.
Qué visitar en Bloody Bay
Bloody Bay es de visita imperdible para todos aquellos vacacionistas decididos a conocer lo mejor del territorio jamaicano. Es una maravilla tropical que nos deja conocer lo mejor de Negril. Se localiza en la zona occidental de la isla, a solo unos diez minutos de Montego Bay. Es un sitio de playa al cual acuden cientos de lugareños y visitantes de muchas nacionalidades diferentes, estructurando un mosaico cosmopolita muy interesante.
Vasta cinta de arena blanca y palmeras jubilosas de sol, Bloody Bay tiene una atmósfera relajada y apacible, y es tan propicia para hallar reposo, como para divertirse con diferentes deportes náuticos, o bien, para contemplar bellos paisajes en compañía de nuestra pareja. Cierta leyenda local, narra el episodio del pirata Jack Rackman, quien, acompañado de su banda de corsarios, fue atrapado en los alrededores de la bahía. Ellos habían bebido antes ingentes cantidades de ron y esa fue la causa de su perdición.
En la actualidad no son piratas, ni fuera de la ley quienes acuden a las costas de Bloody Bay, sino más bien, familias completas, muchas de ellas con niños pequeños, así como también, alegres estudiantes, recién casados y afectos a los deportes náuticos, quienes visitan este hermosos paraje de Jamaica.
Como complemento a una visita a la playa Bloody Bay, aconsejamos visitar la cercana comunidad de Negril, con su gran playa de 10 kilómetros de largo. Es una playa bastante célebre por sus aguas cristalinas y por la arena suave y blanca que posee. No hay que dejar de lado la vida nocturna que caracteriza a esta comunidad, detalle que comparte con Bloody Bay. Son lugares excelentes para ir a bailar los seductores ritmos antillanos y conocer personas encantadoras llegadas de todos los continentes.
Cómo llegar a Bloody Bay
La isla de Jamaica cuenta con varios aeropuertos excelentes, como es el caso del Aeropuerto Internacional de Montego Bay. Es uno de los más dinámicos de la nación, ya que recibe vuelos procedentes de las capitales más importantes del orbe. Saliendo del aeropuerto, es fácil llegar a principales destinos jamaiquinos, incluyendo, por supuesto a Bloody Bay.
Información relevante acerca de Bloody Bay
Para quienes deseen llevar a cabo otras actividades además de descansar y relajarse en Bloody Bay, existen muchas otras actividades, disponibles, como el kayak, el surf, la navegación en vela y el parapente. No obstante, si hay algo recomendable para disfrutar en Bloody Bay es el buceo, por contar con muchos espacios submarinos para divertirse con esta actividad náutica.
Actividades a realizar en Bloody Bay
Pero Bloody Bay no solamente es ponderable por sus lindas playas, sino también por tratarse de un sitio con gran valor cultural e histórico. Allí, los visitantes pueden disfrutar de centros comerciales, museos, calles con numerosas anécdotas, y muchos restaurantes para conocer, desde el enfoque del turismo gastronómico, las tradiciones culinarias locales.