Brindisi, conocida como la «Puerta de Oriente» desde la antigüedad, cuando se convierte en un importante atracadero para las tropas romanas en un primer momento, y para los mercaderes de la 'Serenísima' más tarde.
Un puerto en Apulia que, aún hoy, mantiene importantes lazos de unión turísticos y mercantiles con países de ultramar.
El litoral es bajo y arenoso a lo largo de toda la costa, gracias al clima suave que favorece la prolongación de las vacaciones hasta los meses otoñales.
Bonitas localidades turísticas, junto con una de las principales áreas naturales de la región y un importante centro termal, componen la oferta turística de la franja costera de Brindisi, donde no faltan importantes huellas de épocas lejanas.
Gran parte del interior está ocupada por las Murge que, en la zona septentrional, se encuentran con el Valle de Itria, conocido como la Tierra de los Trulli. Campos cultivados se alternan, formando un mosaico de colores, con grandes extensiones de olivares, viñedos y diversas plantaciones de frutales, interrumpidos sólo por las carreteras y los esporádicos claros. Antiguos pueblos en fortalezas defensivas y torres de avistamiento narran la historia unida a Federico II de Svevia y a la dominación angevina, pero no faltan restos aún más antiguos asociados a la presencia de los mesapios en la época prehistórica.
Que ver en Brindisi
Espléndidas son también las playas arenosas esparcidas a lo largo de la costa y bañadas por las transparentes aguas del Adriático, coloreadas con los reflejos de la flora mediterránea y la vegetación de los fondos marinos que alternan zonas de arena con zonas rocosas. Al norte de Ostuni, una de las más interesantes áreas naturales de la región, el oasis de WWF de Torre Guaceto. Las aguas del mar encuentran refugio insinuándose entre los acantilados, bahías arenosas y amplios cañaverales, al abrigo de una densa vegetación mediterránea que cubre el tramo de tierra firme. Hábitat ideal para agachadizas comunes, patos salvajes, ruiseñores bastardos y especies anfibias, pero también especies vegetales marinas como las praderas de posidonia oceánica, de gorgonácea y de coral.
Interesante la zona arqueológica de Egnazia, con importantes restos vinculados a la época romana y a la presencia de asentamientos aún más antiguos. Continuando el viaje hacia el interior, encontramos Cisternino, capital brindisina del Valle de Itria, donde blancas casas, estrechos callejones, patios y escaleras, arcos y balcones coloreados con flores diseñan esta pequeña joya de arquitectura. Edificios históricos de época medieval y renacentista hacen aún más interesante un paseo entre las calles del antiguo burgo.
Que ver en Brindisi
Niños y adultos podrán maravillarse visitando el parque de animales silvestres más grande de Italia, situado a pocos kilómetros de Fasano. Tigres, leones, osos, elefantes, antílopes, jirafas, bisontes, ciervos, cebras y camellos viven, en absoluta libertad, en los espacios del parque, entre una exuberante vegetación mediterránea. El visitante, a bordo de su propio coche, podrá recorrer los itinerarios trazados y admirar, de cerca, estos bellísimos animales.
El parque ofrece también la posibilidad de visitar la sala ornitológica, la tropical, el metrozoo y el sector oceánico, cada uno de ellos dedicado a alojar especies diversas: desde los papagayos a los diamantes australianos, de los caimanes a las serpientes, desde los osos a los hipopótamos, de los delfines a los pingüinos. Además del zoo safari, hay un gran parque de diversión con más de 25 grandes atracciones adaptadas a todas las edades.