Es interesante en cada ocasión, recomendar Jaipur, uno de los sitios con mayor hechizo en la nación hindú.
Es un lugar al cual, tradicionalmente, se le conoce como la Ciudad Rosada. En el año de 1728, el entonces rajá Jai Singh II llevó la capital desde el territorio de Rajasthán hasta Jaipur, urbe a la cual se le nombra como 'la Ciudad Rosada'. No obstante, el color al cual le debe este nombre Jaipur, lo obtuvo en 1905, cuando esta ciudad recibió al príncipe Alberto, quien fuera consorte de la Reina Victoria de Inglaterra.
Jaipur no es realmente una urbe particularmente linda o llamativa, ya que se exhibe como una ciudad poco cuidada y avejentada. La verdad es que pocas en la India no se presentan así. No hay que olvidar que en esta nación asiática hay mucha pobreza, lamentablemente. Jaipur hasta cierto punto, es mucho más tradicional y de un ambiente más que Delhi.
De cualquier manera, supera a la capital de la India en su proyección cultural. Basta con admirar los saris de las mujeres que viven en Jaipur: son más coloridos en tonos verdes, rojos, rosas que los que se usan en otras ciudades de la India.
Cuando se visite esta ciudad hindú, no hay que perderse el Palacio de los Vientos, al cual se le da este nombre por las 593 celosías que aparecen en su fachada, y por entre las cuales penetraba el viento del Este. Edificado en 1799 el Hawa Mahal, el Palacio de los Vientos, exhibe una forma escalonada y sobresale por sus vistosos colores, en blanco y rojo. Desde estas ventanas, las mujeres del palacio tenían la oportunidad de mirar al exterior sin ser advertidas, preservando su pureza de esta manera.
Enfrente del Hawa Mahal, se encuentra el observatorio Jai Singh II, un maravilloso sitio en donde se puede calcular con una notable exactitud no solamente la hora solar, sino también la ubicación de los planetas o sus ascendientes entre otros datos astronómicos asombrosos.
El Palacio de la Bienvenida tiene sus orígenes en el año 1900 y actualmente es un valioso museo en donde se atesoran colecciones muy muy vinculadas a la historia de la nación hindú. En esta colección pueden hallarse trajes antiguos, armas y joyas, entre otras piezas. Este es un museo en donde los visitantes pueden contemplar un acervo muy interesante, aunque el inmueble aparece un poco descuidado.