Sa Foradada es uno de los miradores más conocidos de Mallorca, en gran parte por ofrecernos unas espectaculares vistas al mar Mediterráneo y a la costas de Mallorca.
Lo encontramos en el término municipal de Deià, en la sierra de Tramontana, y es lugar de peregrinación obligado para todos aquellos visitantes que quieran disfrutar de inmejorables vistas en un marco natural idílico, así como para los amantes del senderismo, debido a que para acceder hasta la zona, será necesario atravesar un frondoso bosque que nos dará la oportunidad de disfrutar de un agradable paseo en plena naturaleza.
Para llegar a Sa Foradada necesitaremos llegar a Deià y, seguidamente, continuar hasta la cala Deià, donde hallaremos el conocido mirador y podremos apreciar el agujero que forma la roca. De ahí su nombre, ya que foradada en castellano significa agujereada. Dice la leyenda que dicho hueco se debe a un cañonazo producido durante la guerra de 1582 entre corsarios norteafricanos y cristianos a las órdenes de Mateu Sanglada.
En la actualidad, miles de viajeros se acercan hasta la zona de Sa Foradada, principalmente a través de la finca de Son Marroig, lugar en el cual se pueden observar las mejores vistas. Este emplazamiento ha sido fuente de inspiración de numerosos artistas que han querido inmortalizar ese espectacular paisaje en un lienzo, como lo hizo el pintor austriaco Erwin Hubert.
El mejor momento para visitar Sa Foradada es la puesta del sol, donde, además del paisaje, podremos disfrutar del juego de colores que ofrece el mar Mediterráneo cuando cae el día.
Otra opción muy recomendable es comer en el restaurante de Son Marroig, en el que, además de disfrutar de las citadas vistas al exterior, podremos degustar las especialidades gastronómicas de la isla.
Sa Foradada, lugar ideal para aquellos amantes de la naturaleza que quieran escapar del turismo de sol y playa de la isla.