Suelen hallarse en destinos turísticos de importancia o barrios de moda, montañas y playas.
Siguen una línea conceptual y un diseño altamente vanguardista. Se caracterizan por brindar una atención personalizada y por un afán intenso de exclusividad. Se trata de los hoteles boutique, surgidos de una tendencia en el medio del alojamiento y el turismo, que poco a poco va consolidándose a lo grande.
No obstante, la noción de de hotel boutique aún no está perfilada del todo. Muchos viajeros han oído hablar de ella y varios más se han alojado en uno de estos hoteles, pero quizás solo unas cuantas personas comprenden de bien a bien, lo que tal idea trata de expresar. En última instancia, los hoteles boutique parten de una novedosa propuesta turística, tan exitosa, que existen personas que viajan a cierto destino turístico, con la sola intención de alojarse en uno de estos exclusivos lugares. En el caso de México, algunos hoteles boutique con esta capacidad e convocatoria son el Hotel Encanto en
Acapulco o la Casa Natalia en
Los Cabos.
La noción de boutique se vincula con esta tendencia hacia la exclusividad que nos proyecta tal palabra francesa. Quien se encuentra en busca de un producto exclusivo u original, acude a una boutique y uno a una tienda convencional. Lo mismo en el caso de los hoteles: quienes desean recibir una atención única y con estilo, visitan los hoteles boutique. Mientras las grandes cadenas hoteleras se esfuerzan en un servicio, concepto y arquitectura consistente y generalizante, los hoteles boutique buscan precisamente lo contrario: ser exclusivos, pequeños, para viajeros selectos y sofisticados.
Los hoteles boutique son fácilmente identificables como tales, por su atmósfera. Su interior, por lo común, da la apariencia de ser una suerte de escenario, en donde cada detalle se relaciona con un concepto especial. Esa es la razón por la que en ocasiones se les confunda con los hoteles de diseño. Precisamente en ello, es donde se requiere ser bastante crítico: si un hotel boutique lo que nos propone es alejarnos de la cotidianidad y la rutina, entones prescindirá de elementos como la TV o tendrá uno muy sencillo, para así desmarcarse de las grandes cadenas hoteleras, quienes, en este campo, lucharán por hacerse de las pantallas más grandes. Y aunque tal aspecto le reste alguna estrella, de acuerdo a la clasificación convencional de los hoteles, no minará el estilo que maneje, en lo absoluto.