Hace unos meses os hablamos de un nuevo hotel que tenía la intención de abrir sus puertas en Japón, en el cual los empleados del mismo serían auténticos robots.
El proyecto nos dejó con muchas ganas de saber cómo acabaría la cosa, así que cuando hemos visto la crónica del periodista Spencer Kelly, nos hemos quedado totalmente prendados de su aventura y la hemos querido compartir con vosotros. Lo que podéis ver en el vídeo en cuestión es una demostración de cómo los robots se pueden convertir en perfectos empleados de un hotel.
Y no podemos quedarnos más asombrados con el resultado. El hotel, conocido como Henn-na Hotel, está plagado de criaturas robóticas que sorprenden porque no se limitan a tener el típico aspecto humanoide que solemos vincular con este tipo de inventos. En la entrada del recinto espera a los visitantes un robot a modo de flor, que se contonea con un movimiento hipnótico. Si alguna vez habéis visto las típicas plantas-figura que se mueven de esta misma manera debido a los rayos del sol, no hay duda de que os recordará a ello.
Con mirada de sorpresa, el periodista se introduce en el hotel y se encuentra con la recepcionista, una mujer-robot de rasgos muy reales y movimientos sorprendentemente humanos. Todavía se nota que hay margen de mejora, sobre todo con los gestos faciales, pero el resultado es incluso mejor a lo que podríamos haber imaginado.
Al lado de la recepcionista humana hay otro empleado que también le echa una mano al visitante humano que acaba de llegar. Lo curioso y surrealista al mismo tiempo, es que no se trata de otro humanoide, sino de un auténtico dinosaurio robótico. Su aspecto es terrorífico y lo primero que haríamos sería salir corriendo si le viéramos moverse. Pero se encuentra en su posición de trabajo esperando a tramitar la entrada del viajero y a darle la bienvenida como lo merece. Nos parece uno de los dinosaurios de Jurassic Park, pero en este particular hotel no hay que temer por la vida.
A partir de ahí nos quedamos en blanco, suponemos que para próximas actualizaciones. Pero no penséis que el resto del hotel está descuidado, porque también hay robots y otro tipo de tecnología avanzada que nos hace sentir estar en un lugar futuro. Todas las instalaciones disponen de dos sistemas que se ocupen de que todo funcione como debe hacerlo. Uno es el reconocimiento facial, con el cual se da mejor soporte a los huéspedes. El otro es el uso de comandos de voz que nos permiten recibir soporte a todo lo que necesitemos. Gracias al Henn-na Hotel es muy probable que todos nos vayamos acostumbrando a estar rodeados de robots. En este caso, el hotel se encuentra, por si queréis visitarlo, en Nagasaki.