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Artesanía tamaulipeca

Nota sobre Artesanía tamaulipeca

El estado de Tamaulipas cuenta con importantes comunidades que se especializan en la manufactura de diversos objetos, utilizando distintos materiales como barro, madera, gamuza, fibras vegetales y elementos marinos, entre otros.

La artesanía tamaulipeca se nutre de la necesidad e imaginación de quienes dan forma y vida a estos productos los cuales se llegan a adquirir por su calidad y belleza.


Son artesanías elaboradas particularmente en las Sierras del Sudoeste, las siguientes: alfarería, barricas de madera, carretas de madera para yuntas, cestería de caña de otate, silla de madera y de montar, talabartería, corte y confección de la cuera tamaulipeca, productos artesanales con piel delgada y manejable, productos artesanales con baqueta, tejidos de ixtle o lechuguilla, tejidos de maguey, tejidos de ixtle de sotol, tejidos de ixtle de somate, tejidos de rosita y tejidos de tule.

LA CUERA TAMAULIPECA

Hay una prenda de vestir con la que en todo México se identifica a los tamaulipecos: la cuera. Es un artículo que a lo largo y ancho del estado se usa como prenda de gala para asistir a una fiesta, para bailar y tocar música o para un desfile. Se le puede ver tanto en Ocampo como en Tampico, Ciudad Victoria, Matamoros, Reynosa o en Nuevo Laredo; es, sin lugar a dudas, el vestido típico tamaulipeco.

Ramón Mendoza, artesano de Tula, nos narra el origen de esta prenda tan singular, con filigrana de cuero y barbas en las mangas, pecho y espalda.

“Anteriormente se le llamaba cotón; era una chamarra lisa, larga hasta el suelo, exclusivamente para los vaqueros. La hacían de gamuza de venado pero la hacían para el campo, para protegerse de las ramas, y de ahí nació la idea de hacerle una al general Alberto Carrera Torres, pero ya con algunos adornos; en ese tiempo no se ponían las barbas que ponemos ahora.

Esa primera cuera la hizo el papá de mi suegro, el capitán Rosalío Reina, que fue compañero revolucionario del general; dice mi mujer que la hizo en plena sierra: donde andaba ahí cargaban la máquina. Los dibujos los tomó de las flores silvestres del campo y de ahí para acá se ha venido estilizando a través de tanto tiempo. No tengo una fecha exacta, fue entre 1915 y 1917”.