Si hay algo que caracteriza a las playas de Nayarit es su ambiente puro, esa atmósfera que define a los refugios costeros que mantienen mucho de su inocencia silvestre. Por supuesto, son rincones tropicales capaces de satisfacer a los viajeros en busca de paz y tranquilidad. Boca de Camichín se encuentra en este entorno apacible, es una referencia imperdible para todos los turistas interesados en disfrutar de los rincones más paradisiacos del Pacífico Mexicano.

Boca de Camichín se localiza en la zona donde desemboca el río San Pedro, un vasto brazo de mar que forma una de las áreas de esteros y marismas más grandes de Nayarit. Allí se producen considerables cantidades de camarón y otras variedades marinas, como el pargo, el ostión y el róbalo, entre muchas más.

La playa que les comentamos es muy frecuentada por turistas nacionales y foráneos atraídos por sus hermosos paisajes y su destacada gastronomía, con abundantes platillos preparados con mariscos y pescado fresco. En Boca de Camichín se ofrecen agradables recorridos en lancha por toda el área de los esteros por entre vastos canales y lagunas de gran belleza. Los aficionados al ecoturismo disfrutan grandemente contemplando la generosa vegetación integrada por tule, peyuque y manglares. La fauna particular de la zona incluye venados, jabalí, puma, garza, pato, grulla, mapache, etc.

Boca de Camichín cuenta con un embarcadero desde donde parte una excursión muy interesante a la Isla Isabel, ínsula reconocida como parque nacional. Es una porción geográfica nayarita de enorme atractivo, además de tener una gran importancia ecológica por ser un centro reproductor de innumerables aves marinas. Además, los viajeros tienen la oportunidad de contemplar impresionantes acantilados, otros islotes, hermosas formaciones coralinas, playas casi vírgenes y una laguna del sueño en el centro de su territorio insular.

La comunidad que se encuentra en este formidable estero nayarita surgió hace aproximadamente medio siglo. En los pintorescos callejones de este poblado se vive una intensa actividad especialmente entre los meses de junio a agosto, cuando se presenta el tiempo de siembra. En los rústicos restaurantes que se encuentran en la playa, en cómodas enramadas, los visitantes tienen la ocasión de saborear ricos ostiones y otras especies marinas capturadas en el estero: camarón, tiburón, curvina, robalo, etc. Es importante señalar que en Boca de Camichín también se tiene un excelente espacio para la pesca deportiva.

No lejos del poblado de Boca de Camichín se ubica Los Corchos, una playa de tersa arena dorada, moderada pendiente y oleaje calmo. Sin embargo, lo más destacado es la limpieza de esta playa y la media docena de palapas donde se sirven suculentos mariscos y cerveza fría. Hay que resaltar que los atardeceres en Playa Los Corchos son espectaculares, con doradas tonalidades colmando las enramadas, al tiempo que los visitantes se aprestan para terminar sus actividades y partir a sus hogares en Boca de Camichín. De manera que al final del día la playa queda desierta, forjando un romántico entorno, como pocos en las costas mexicanas.

No lejos de Boca de Camichín se encuentra la población de Santiago Ixcuintla, donde se puede admirar el mural Nuestras Raíces, creado por el artista José Luis Soto quien trabajó esta creación plástica entre 1990 y 1992. Este notable mural fue elaborado con variados materiales como: conchas, arena, obsidiana, piedra laja, vidrio, mosaico, talavera y mármol.
Les recomendamos conocer lo mejor de las costas nayaritas y principalmente Boca de Camichín, una joya del turismo mexicano.