Cabo de Gata parque natural de Almería
Los impresionantes paisajes, las playas de aguas cristalinas y los pueblos con encanto hacen del cabo de Gata uno de los principales atractivos del litoral mediterráneo
El Parque Natural de cabo de Gata-Níjar es una reserva marítimo-terrestre ubicada en el extremo oriental de la provincia andaluza de Almería. El parque comprende desde los municipios cercanos a la capital almeriense hasta Carboneras. Con una extensión de 38.000 hectáreas terrestres, 12 hectáreas marinas y más de 60 kilómetros de costa es uno de los entornos naturales más bonitos del litoral mediterráneo español. La gran cantidad y variedad de paisajes, playas y calas, además de la riqueza de la flora y la fauna terrestre y marina, lo convierten en un importante destino turístico.
El origen volcánico y el clima semiárido son dos de las principales características que hacen a este lugar único en España. La sierra de Cabo de Gata es una de las zonas volcánicas más grandes e importantes de la península ibérica. Especialmente interesantes son algunas de las formaciones rocosas como el valle de Rodalquilar, un antiguo cráter de 8 kilómetros de diámetro que desemboca en el mar; las chimeneas volcánicas, siendo el mejor ejemplo el arrecife de las Sirenas o las dunas fosilizadas que podemos encontrar en Los Escullos y en la playa de los Genoveses.
Las playas y las calas del cabo de Gata son, sin duda, unos de los atractivos turísticos más fuertes del parque por sus playas vírgenes y sus aguas cristalinas, algunas de las cuales solo se puede acceder a pie o en barco. La cantidad y variedad de playas y calas que merecen la pena disfrutar es muy grande. Algunas de las más conocidas son la playa del Mónsul, la playa de los Genoveses y la playa de los Muertos, entre otras.
La playa del Mónsul está considerada la más emblemática del cabo de Gata. De esta playa llama la atención su arena fina de color oscuro (por su origen volcánico), su agua transparente y las formaciones rocosas que invaden parte de la playa y el agua. Por su singularidad y belleza ha sido elegida como escenario de películas tan conocidas como Indiana Jones y la última cruzada, Lawrence de Arabia o En busca del arca perdida.
La playa de los Genoveses es, con más de un kilómetro de longitud, la bahía más bonita del parque. Igual que la playa del Mónsul, su arena es fina y oscura. Rodeando esta bonita playa, podemos disfrutar de un paisaje típico del parque, compuesto de chumberas, esparto, tomillo y lavandas. El acceso en coche tanto a este playa como a la playa del Mónsul está limitado a un número determinado de vehículos al día, por lo que si se quiere llegar a ambas playas una vez superado el límite hay que hacerlo en autobús desde el pueblo de San José (1 euro cada trayecto) o andando.
La playa de los Muertos es otra de las playas más famosas del cabo de Gata. Su nombre se debe a que las corrientes de sus aguas arrastraban hasta la orilla los cuerpos de marineros, comerciantes y piratas cuyos barcos habían naufragado cerca de la costa. Tiene el agua más cristalina de toda la zona. Con viento de levante, el baño en esta playa es peligroso, por lo que se debe tener prudencia. A diferencia de las playas del Mónsul y los Genoveses, la arena está formada por piedrecitas. El acceso a esta playa se hace andando, por lo que conviene llevar un calzado adecuado porque el camino es bastante abrupto. Es una zona idónea para el buceo por la claridad de sus aguas y los bellos paisajes marinos que podemos encontrar.
Merece también la pena visitar los pueblos que se encuentran dentro de los límites del parque. Entre los más destacados están San José, el más grande de todos, por eso se considera la capital del Parque Natural. Este bonito pueblo se caracteriza por las casas blancas, de poca altura y tejados planos que forman un bello paisaje. Cerca de San José encontramos las mencionadas playas del Mónsul y los Genoveses. Otro de los pueblos de cabo de Gata es Agua Amarga, el cual, al igual que San José, está formado por casitas blancas. Por sus calles encontraremos una gran cantidad de tiendas y puestos de moda y artesanía. Próximo a Agua Amarga está la Mesa Roldán, un domo volcánico en cuya cima hay una antigua torre de vigilancia y un faro desde el que disfrutaremos de una impresionante vista del pueblo y de sus playas. En los últimos años, la oferta hotelera en estos pueblos ha aumentado considerablemente, convirtiéndose en una buena opción para pasar las vacaciones.
El Parque Natural de cabo de Gata es un lugar ideal para disfrutar de unos días de relajación, visitando los bonitos pueblos o pasando el día en alguna de las impresionantes playas y calas. Aunque si lo que quieres es no parar de moverte, encontrarás una amplia oferta de actividades tanto terrestres (senderismo y rutas en bici, a caballo o en quad) como acuáticas (buceo, kayak, paddle surf o motos acúaticas, entre otras) que te permitirán disfrutar del entorno haciendo lo que más te gusta.
El Parque Natural de cabo de Gata-Níjar es una reserva marítimo-terrestre ubicada en el extremo oriental de la provincia andaluza de Almería. El parque comprende desde los municipios cercanos a la capital almeriense hasta Carboneras. Con una extensión de 38.000 hectáreas terrestres, 12 hectáreas marinas y más de 60 kilómetros de costa es uno de los entornos naturales más bonitos del litoral mediterráneo español. La gran cantidad y variedad de paisajes, playas y calas, además de la riqueza de la flora y la fauna terrestre y marina, lo convierten en un importante destino turístico.
El origen volcánico y el clima semiárido son dos de las principales características que hacen a este lugar único en España. La sierra de Cabo de Gata es una de las zonas volcánicas más grandes e importantes de la península ibérica. Especialmente interesantes son algunas de las formaciones rocosas como el valle de Rodalquilar, un antiguo cráter de 8 kilómetros de diámetro que desemboca en el mar; las chimeneas volcánicas, siendo el mejor ejemplo el arrecife de las Sirenas o las dunas fosilizadas que podemos encontrar en Los Escullos y en la playa de los Genoveses.
Las playas y las calas del cabo de Gata son, sin duda, unos de los atractivos turísticos más fuertes del parque por sus playas vírgenes y sus aguas cristalinas, algunas de las cuales solo se puede acceder a pie o en barco. La cantidad y variedad de playas y calas que merecen la pena disfrutar es muy grande. Algunas de las más conocidas son la playa del Mónsul, la playa de los Genoveses y la playa de los Muertos, entre otras.
La playa del Mónsul está considerada la más emblemática del cabo de Gata. De esta playa llama la atención su arena fina de color oscuro (por su origen volcánico), su agua transparente y las formaciones rocosas que invaden parte de la playa y el agua. Por su singularidad y belleza ha sido elegida como escenario de películas tan conocidas como Indiana Jones y la última cruzada, Lawrence de Arabia o En busca del arca perdida.
La playa de los Genoveses es, con más de un kilómetro de longitud, la bahía más bonita del parque. Igual que la playa del Mónsul, su arena es fina y oscura. Rodeando esta bonita playa, podemos disfrutar de un paisaje típico del parque, compuesto de chumberas, esparto, tomillo y lavandas. El acceso en coche tanto a este playa como a la playa del Mónsul está limitado a un número determinado de vehículos al día, por lo que si se quiere llegar a ambas playas una vez superado el límite hay que hacerlo en autobús desde el pueblo de San José (1 euro cada trayecto) o andando.
La playa de los Muertos es otra de las playas más famosas del cabo de Gata. Su nombre se debe a que las corrientes de sus aguas arrastraban hasta la orilla los cuerpos de marineros, comerciantes y piratas cuyos barcos habían naufragado cerca de la costa. Tiene el agua más cristalina de toda la zona. Con viento de levante, el baño en esta playa es peligroso, por lo que se debe tener prudencia. A diferencia de las playas del Mónsul y los Genoveses, la arena está formada por piedrecitas. El acceso a esta playa se hace andando, por lo que conviene llevar un calzado adecuado porque el camino es bastante abrupto. Es una zona idónea para el buceo por la claridad de sus aguas y los bellos paisajes marinos que podemos encontrar.
Merece también la pena visitar los pueblos que se encuentran dentro de los límites del parque. Entre los más destacados están San José, el más grande de todos, por eso se considera la capital del Parque Natural. Este bonito pueblo se caracteriza por las casas blancas, de poca altura y tejados planos que forman un bello paisaje. Cerca de San José encontramos las mencionadas playas del Mónsul y los Genoveses. Otro de los pueblos de cabo de Gata es Agua Amarga, el cual, al igual que San José, está formado por casitas blancas. Por sus calles encontraremos una gran cantidad de tiendas y puestos de moda y artesanía. Próximo a Agua Amarga está la Mesa Roldán, un domo volcánico en cuya cima hay una antigua torre de vigilancia y un faro desde el que disfrutaremos de una impresionante vista del pueblo y de sus playas. En los últimos años, la oferta hotelera en estos pueblos ha aumentado considerablemente, convirtiéndose en una buena opción para pasar las vacaciones.
El Parque Natural de cabo de Gata es un lugar ideal para disfrutar de unos días de relajación, visitando los bonitos pueblos o pasando el día en alguna de las impresionantes playas y calas. Aunque si lo que quieres es no parar de moverte, encontrarás una amplia oferta de actividades tanto terrestres (senderismo y rutas en bici, a caballo o en quad) como acuáticas (buceo, kayak, paddle surf o motos acúaticas, entre otras) que te permitirán disfrutar del entorno haciendo lo que más te gusta.