Nuestro principal objetivo es crear conciencia en el turismo acerca de la gran riqueza de los litorales en el mundo, además de proyectar al turismo extranjero el inagotable potencial en cuestión de playas. Visita en tus próximas vacaciones las principales Playas del Mundo y ten experiencias de sol y playa que de tan gratas se quedarán para siempre en tu memoria.

Capalbio y la Marisma

Imagen de Capalbio y la Marisma

Capalbio y la Marisma

La Marisma surge en el mar Tirreno, entre Toscana y Lacio, se trata de una zona costera en su mayoría plana que, como recuerda Dante en el III Canto del Infierno, desde Cecina (Livorno), llega hasta Tarquinia (Viterbo), conocida en la época como Corneto.



Se divide en tres partes: la parte de Grosseto, en el centro, la más conocida, rica y de mayor extensión; en el sur la Marisma de Lacio que incluye el litoral de la provincia de Viterbo, y la parte de Pisa en la parte norte, perteneciente a la provincia de Livorno.

Lo que hay que ver
Del latín Maritima Regio, la Marisma es una tierra maravillosa suspendida entre el verde de los parques y el azul del mar.
Los primeros testimonios históricos se remontan al período etrusco y romano, cuando en el suelo marismeño surgieron las importantes ciudades de Tarquinia, Populonia, Cosa y Vetulonia.

Hoy en día, las parques naturales en su día zona de pantanos que no fueron saneadas hasta los años 30, están protegidas por largos tramos de parque natural (en la actualidad, sólo en la provincia de Grosseto se encuentran 13 reservas naturales, además de los varios Oasis del WWF) con una infinidad de variedades de flora de fauna y de rincones de gran belleza.

Entre los lugares más evocadores se encuentra la amplia ensenada del golfo de Follonica, con las espléndidas playas de Cala Martina, Punta Ala y Cala Violina; las playas de Castiglione della Pescaia, antiguo centro de pescadores que surge a los pies del castillo aragonés del que toma el nombre, las de Marina de Grosseto y Talamone, bella localidad sobre el mar. Más al sur surge la encantadora laguna de Orbetello, famosa por su arena dorada, por las playas de la Feniglia y de la Giannella y por los maravillosos encuentros de tierra y mar: de frente se perfila en el mar el verde promontorio de Argentario, destino vacacional exclusivo, con Porto Ercole y Porto Santo Stefano de donde parte el ferry hacia la Isla del Giglio y la de Giannutri.

Prosiguiendo hacia el sur se llega al salvaje litoral de Capalbio, lugar de vacaciones de los emperadores, familias nobiliarias y clases altas en los tiempos de los romanos y, aún hoy, exclusiva y alternativa localidad vacacional. El burgo medieval de Capalbio es una auténtica perla sumergida en la densa vegetación mediterránea de madroño, en la frontera con Lacio. En el característico centro histórico rodeado por la muralla, nos sentimos catapultamos al pasado. Poco después de los límites regionales se encuentran el Parque Natural Arqueológico de Vulci y Tarquinia, cuya necrópolis ha sido incluida en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.

Lo que hay que hacer
Lugar ideal para los amantes de la naturaleza, que hay que descubrir caminando, sobre una bicicleta o, mejor todavía, a caballo, la Marisma, junto con Saturnia, es un destino de referencia para los amantes de las termas y del bienestar.
La costa mide 160 km de largo y ofrece una intensa vida de vacaciones en el mar con diversiones y entretenimientos para los turistas de todas las edades; se puede, por ejemplo, alquilar barcas de vela o de motor, practicar windsurf, esquí acuático y pesca submarina. Abundan las escuelas de vela, de motonáutica y de inmersiones adecuadas a todo tipo de público gracias a los varios centros de submarinismo profesionales que permiten efectuar maravillosas inmersiones y descubrir la colorista vida submarina de la zona.

El estupendo promontorio del Monte Argentario con sus calitas y bahías, algunas accesibles sólo a través del mar, es considerado por los amantes del mundo submarino, una de las zonas más interesantes de Italia por la abundancia de peces de sus fondos marinos llenos de conchas y corales.

Lo que no hay que perderse
Para vivir y conocer lo mejor posible la zona se recomienda dormir en los característicos agroturismos que hacen de la hospitalidad un auténtico arte, o bien alquilar una 'cascina'.
Además, en la Marisma se puede asistir a los espectáculos de los 'Butteri' (una especie de cowboys del lugar, pastores a caballo de las vacas marismeñas), típicos durante las ferias del sector, las fiestas de los pueblos y demás manifestaciones nacionales e internacionales.

Lo que hay que probar
El 'acquacotta', una sopa de verduras muy simple y muy pobre, enriquecida con los ingredientes de la estación como achicoria, broccoli y borraja.