El transporte aéreo ya forma parte de la rutina de muchas personas, ya sea en el ámbito laboral o del ocio.

Los asiduos tienen más que clara la restricción de los líquidos en el equipaje de mano, el procedimiento para la facturación online y los ejercicios contra el síndrome de la clase turista. Pero incluso si formas parte de ese grupo que pasa horas viajando en avión, te puede venir bien repasar estos consejos básicos para tener un vuelo agradable.

El equipaje

Plantéate conseguir una maleta que cumpla con las medidas permitidas por tu aerolínea para el equipaje de mano, si viajas por pocos días. Si vas a despachar equipaje en la bodega del avión, recuerda meter en ella los líquidos que no necesites durante el vuelo. Guarda en tu bolso el cargador del teléfono móvil, los datos de contacto del lugar donde te alojarás y aquello que consideras imprescindible en caso que surjan imprevistos con tu maleta.

Durante el vuelo

Uno de los consejos más simples consiste en masticar chile en el despegue y el aterrizaje para aliviar la presión en los oídos. En viajes largos, resulta conveniente beber agua, vestir ropa holgada y caminar por la cabina del avión para favorecer la circulación de la sangre. A la hora de elegir tu asiento, recuerda que los lugares más transitados y ruidosos son los más cercanos a los baños. Una almohada inflable, unos tapones, y un antifaz pueden ser útiles para descansar mejor a bordo.



Seguridad a bordo

Es importante seguir los consejos de seguridad proporcionados por la tripulación. Apagar el teléfono móvil es un requisito indispensable, muchas compañías alertan que debe estar completamente apagado y especifican que no deben dejarse encendidos mediante el ?modo avión?. Colocar los asientos en posición vertical y las mesitas plegadas en el despegue y el aterrizaje es otro de los consejos básicos, así como abrocharse el cinturón cuando se indique. Tras el aterrizaje, hay que vigilar al abrir los compartimentos superiores ya que alguno de los elementos que almacenan podrían caerse.