¿Cuál es la mejor forma de aprovechar un viaje?
“Una vez al año, ve a algún lugar en el que nunca hayas estado antes”. Dalai Lama
A todos nos gusta viajar –o a casi todos-, pero a veces parece que tenemos que tener a alguien al lado que nos diga: ¿Viajamos? A alguien que nos empuje a hacerlo; que nos encuentre tiempo para ello. Esto me recuerda a un viaje que hice a unas bodegas de vino, donde preguntamos a la experta enóloga cuándo era el mejor momento para beber el vino que comprábamos. “Las ocasiones hay que crearlas”, contestaba. Así que en este caso igual, si quieres descorchar tu viaje, el mejor momento para que lo hagas es ahora (o cuánto antes). De este placer hablaremos nuevamente hoy, para daros algunos consejos personales sobre cómo disfrutar mejor los viajes.
Viaja “fuera de temporada”
Viajar es la mejor forma de acabar con la rutina, pero para ello debemos estar dispuestos a romper algunas reglas. Viajar al mismo lugar de siempre, con la misma gente de siempre y la sombrilla en la mano, es una buena forma de desconectar, pero eso no es viajar. Eso es pasar el verano en el pueblo o en la playa, pero viajar es diferente.
Por eso el primer consejo es que viajes fuera de temporada, en un momento que nunca lo hayas hecho (evita, por tanto Navidad y Semana Santa, que encima son más caras) y a un lugar donde no hayas estado antes. Uno no es consciente de lo que ayuda hacer un parón en mitad de un trimestre hasta que lo hace. No hay excusas.
Viaja lejos
Yo tengo una máxima, que como toda regla tiene su excepción: “Viaja cuánto más lejos, mejor”. Por supuesto que no siempre es así; yo disfruto muchísimo descubriendo los mil lugares increíbles y únicos que tenemos en España. Pero por lógica, al final, estos destinos suelen parecerse mucho más a lo que veo en mi día a día. Con viajar lejos, me refiero a viajar a lugares distintos, que hagan nacer en ti la chispa de conocer otras formas de vivir, otras realidades y no querer parar nunca.
El viaje idóneo para todo amante de los viajes es el que no tiene límite de tiempo ni de lugar; de ahí mi máxima. Pero teniendo en cuenta que ese tipo de viaje –en que lo dejas todo- es muy complicado, creo que no debemos dejar de pasar la oportunidad de conocer lugares lejanos.
Haz un road trip
Personalmente, te aconsejo que alguna vez en tu vida hagas un road trip. Piensa en una zona que te gustaría visitar y que sea asequible para llegar en vehículo, prepara los víveres, el mapa, apunta algunos campings de los destinos a visitar y ¡a la carretera! Quizás no sea tan exótico como lo fuera para Kerouac y compañía allá por los años 80, pero desde luego os puedo asegurar que es liberador y auténtico, que no hay nada mejor que improvisar por el camino, comer al aire libre o ver tres destinos en el mismo día.
Deja el móvil en casa
Uno de los mejores placeres de viajar es poder desconectar (además de disfrutar, aprender o abrir la mente), por lo que no hay cosa que más nerviosa me ponga que ver a un viajero enganchado a Internet a la mínima oportunidad. Deja el móvil (aunque hay que reconocer que en determinados tipos de viajes viene muy bien, para poder buscar información varia o reservar hotel), prueba, y verás como es posible desconectar. ¿Qué hay que no pueda esperar? ¡Vamos!
Prueba, viaja solo
Otro de los consejos para sentir los viajes al máximo es que una vez en la vida al menos viajes solo. Me parece una experiencia muy enriquecedora para ser conscientes de que realmente estamos disfrutando del destino, de las distintas actividades e incluso del camino (de esperar un avión, coger el metro, dormir en un hotel).
Aunque al principio dé un poco de miedo y parezca una locura, es increíble la de cosas que te sorprenderán cuando lo hagas.
A todos nos gusta viajar –o a casi todos-, pero a veces parece que tenemos que tener a alguien al lado que nos diga: ¿Viajamos? A alguien que nos empuje a hacerlo; que nos encuentre tiempo para ello. Esto me recuerda a un viaje que hice a unas bodegas de vino, donde preguntamos a la experta enóloga cuándo era el mejor momento para beber el vino que comprábamos. “Las ocasiones hay que crearlas”, contestaba. Así que en este caso igual, si quieres descorchar tu viaje, el mejor momento para que lo hagas es ahora (o cuánto antes). De este placer hablaremos nuevamente hoy, para daros algunos consejos personales sobre cómo disfrutar mejor los viajes.
Viaja “fuera de temporada”
Viajar es la mejor forma de acabar con la rutina, pero para ello debemos estar dispuestos a romper algunas reglas. Viajar al mismo lugar de siempre, con la misma gente de siempre y la sombrilla en la mano, es una buena forma de desconectar, pero eso no es viajar. Eso es pasar el verano en el pueblo o en la playa, pero viajar es diferente.
Por eso el primer consejo es que viajes fuera de temporada, en un momento que nunca lo hayas hecho (evita, por tanto Navidad y Semana Santa, que encima son más caras) y a un lugar donde no hayas estado antes. Uno no es consciente de lo que ayuda hacer un parón en mitad de un trimestre hasta que lo hace. No hay excusas.
Viaja lejos
Yo tengo una máxima, que como toda regla tiene su excepción: “Viaja cuánto más lejos, mejor”. Por supuesto que no siempre es así; yo disfruto muchísimo descubriendo los mil lugares increíbles y únicos que tenemos en España. Pero por lógica, al final, estos destinos suelen parecerse mucho más a lo que veo en mi día a día. Con viajar lejos, me refiero a viajar a lugares distintos, que hagan nacer en ti la chispa de conocer otras formas de vivir, otras realidades y no querer parar nunca.
El viaje idóneo para todo amante de los viajes es el que no tiene límite de tiempo ni de lugar; de ahí mi máxima. Pero teniendo en cuenta que ese tipo de viaje –en que lo dejas todo- es muy complicado, creo que no debemos dejar de pasar la oportunidad de conocer lugares lejanos.
Haz un road trip
Personalmente, te aconsejo que alguna vez en tu vida hagas un road trip. Piensa en una zona que te gustaría visitar y que sea asequible para llegar en vehículo, prepara los víveres, el mapa, apunta algunos campings de los destinos a visitar y ¡a la carretera! Quizás no sea tan exótico como lo fuera para Kerouac y compañía allá por los años 80, pero desde luego os puedo asegurar que es liberador y auténtico, que no hay nada mejor que improvisar por el camino, comer al aire libre o ver tres destinos en el mismo día.
Deja el móvil en casa
Uno de los mejores placeres de viajar es poder desconectar (además de disfrutar, aprender o abrir la mente), por lo que no hay cosa que más nerviosa me ponga que ver a un viajero enganchado a Internet a la mínima oportunidad. Deja el móvil (aunque hay que reconocer que en determinados tipos de viajes viene muy bien, para poder buscar información varia o reservar hotel), prueba, y verás como es posible desconectar. ¿Qué hay que no pueda esperar? ¡Vamos!
Prueba, viaja solo
Otro de los consejos para sentir los viajes al máximo es que una vez en la vida al menos viajes solo. Me parece una experiencia muy enriquecedora para ser conscientes de que realmente estamos disfrutando del destino, de las distintas actividades e incluso del camino (de esperar un avión, coger el metro, dormir en un hotel).
Aunque al principio dé un poco de miedo y parezca una locura, es increíble la de cosas que te sorprenderán cuando lo hagas.