El hermoso estado de Guerrero
Guerrero es sumamente popular entre los turistas, pues cuenta con uno de los puertos más famosos y llenos de vida de México: Acapulco.
Esta bahía forma parte del llamado Triángulo del sol, área en la que se encuentran otras dos bellezas: Ixtapa-Zihuatanejo y Taxco de Alarcón, Pueblo Mágico.El estado es atravesado por la Sierra Madre del Sur y la del Norte, por lo que posee una gran cantidad de montañas, depresiones y lagunas que son aprovechadas para la práctica de deportes extremos.
Asimismo, este estado atesora una serie de grutas – cavernas con formaciones de estalactitas y estalagmitas – que muestran el impresionante interior de la tierra y de la fauna que habita en ella.
Algunas grutas importantes son la de Juxtlahuaca, la de Oxtotitlán y la de Cacahuamilpa, siendo esta última la más grande e imponente. Tal es su fama que ha sido escenario de películas como Viaje al centro de la tierra con el actor estadounidense Brendan Fraser, y de comerciales de renombradas marcas de cerveza.
Las tierras guerrerenses también conservan una gran cantidad de vestigios arqueológicos. Son 1,705 los sitios antiguos encontrados en la zona, siete de ellos abiertos al público para goce de los visitantes. Entre ellos están Xochilapa, Palma Sola, Cuetlajuchitlán, Teopantecuanitlán y Tehuacalco.
Entre las festividades tradicionales cabe destacar la Danza de los Tlacololeros, originaria del municipio de Chichihualco; la fiesta del Xilocruz, la de Teopancalaquis, así como la típica feria de San Mateo que se celebra el 24 de diciembre.
Las celebraciones del estado son una experiencia llena de música, expresada a través de tambores, flautas, violines y guitarras; coloridos trajes regionales, sabores y el ambiente que caracteriza a las fiestas mexicanas.
La gastronomía de este estado es una mezcla de la cocina indígena, española y francesa. El resultado es un menú variado que ofrece jumiles (pequeños insectos), aporreado (guiso que puede ser de distintas carnes), chalupitas (base de maíz acompañada de carne y salsa), pozole, mariscos y salsas para todos los gustos. La mejor manera de acompañarlos es con un trago de mezcal. Entre los dulces guerrerenses destacan las pulpas de tamarindo, azucaradas o enchiladas, y las cocadas.