Cuando llega el período de anidación del flamenco rosado las costas de Yucatán se llenan de animación y colorido, sin embargo, hay muchas otras cosas para conocer esta zona de México.

En prácticamente todos los esteros relevantes de las costas yucatecas, acostumbran anidar distintas aves residentes y también migratorias. Entre estas aves sobresale por supuesto, el magnífico flamenco rosado. Al oeste de Mérida, la capital yucateca, aparece Celestún, sitio que en años recientes ha tenido la tendencia de transformarse en un destino exclusivo y con mucho estilo, orientado al eco turismo.

Paraje silvestre de notable hermosura, Celestún cuenta con algunos rústicos hoteles muy agradables. Al otro extremo de Yucatán en la zona limítrofe con Quintana Roo, y más próximo a Cancún que a Mérida, Río Lagartos es otro destino de gran interés. Es aún más rústico que Celestún, pero cuenta con posibilidades ecoturísticas similares. Ambas alternativas de destinos son estupendas para contemplar al flamenco rosado.

La excursión toma aproximadamente un par de horas si bien puede variar de acuerdo a las actividades que se deseen llevar a cabo. Ciertos operadores de tours complementan el paseo con experiencias en kayak, recorridos en manglares y varias más.

Es aconsejable recorrer estas reservas en los inicios de abril, cuando aún pueden observarse algunos polluelos de flamenco.

La pequeña comunidad de pescadores de Celestún se encuentra a una lengua de tierra de distancia de la península. Muchos kilómetros de playas rebosantes de palmeras bordean la zona costera al oeste de Celestún. Sin embargo, son los flamencos del estuario los que atraen la atención de los visitantes. Es posible alquilar embarcaciones para aproximarse a las aves.

Entre estas últimas, además de flamencos también incluyen diferentes especies de zancudos. De igual manera, de acuerdo a las condiciones meteorológicas se proporcionan otros paseos en lancha. Uno de los más frecuentes, es el que conduce a los turistas al bosque petrificado de la Isla de Pájaros, un lugar surrealista, que parece extraído de la mente de artistas como Dalí o Max Ernst. Y es que la prolongada salinización le ha dado lugar a un ambiente de gran desolación.

Además, siempre es aconsejable complementar un paseo por las costas de Yucatán visitando la blanca Mérida, una ciudad de enorme importancia histórica y cultural, en donde los viajeros hallarán hermosos edificios, plazas, restaurantes de excelente calidad, iglesias, parques, plazas y una dinámica vida cultural.