Como perlas de un collar, Los Cabos posee una serie de resplandecientes playas a lo largo del mar de Cortés y del océano pacífico.

este cordón de arena blanca y dorada alberga los resorts más lujosos de la región, acentuados por fantásticas formaciones rocosas que han salvaguardado la integridad de las costas.

Ya sea en bahías poco profundas y arenosas, entre las poderosas olas o al lado del majestuoso arco de roca que señala el límite de las Californias, de alguna manera u otra se va a mojar los pies.

LAND’S END
Los Cabos comenzó hace 70 años en donde termina la tierra, cuando esta hermosa península que divide el azul intenso del Pacífico del cálido mar de Cortés fue descubierta por una nueva generación de viajeros y románticos. Si solamente puede visitar una playa en
Los Cabos, no busque más, aunque el paisaje más famoso de Cabo San Lucas en realidad se compone de varias playas. Las
ondulantes olas acarician las profundas arenas de Playa del Amor. Sumérjase con su esnórquel en Roca Pelícano, un enorme peñón a poca distancia de la playa, o pasee de la mano con su pareja entre singulares torres de piedra y empinados riscos. En el lado del Pacífico encontrará Playa Divorcio, bautizada
así por sus peligrosas aguas y donde no está permitido nadar. En el extremo sur
de la península, únicamente accesible
en barco, se topará con la majestuosidad de El Arco. Cada cuatro a siete años, las mareas creadas por el encuentro entre mar y oceáno producen una pequeña playa temporal al pie de El Arco, que desaparece al final de la temporada.

Llegar a Land’s End es parte de la diversión. Puede tomar un taxi acuático a Playa del Amor desde Médano o la marina, llegar por su cuenta en kayak o, cuando la marea esté baja, caminar sobre las rocas y entre angostos pedazos de costa, donde solo le acompañarán los pelícanos.

MEDANO
Los días de sol y tragos helados se convierten en candentes noches en las mejores discotecas de Los Cabos. No importa cuándo llegue, en Médano siempre hay una fiesta playera. Esta extensión de arena dorada contiene algunos de los mejores hoteles, restaurantes y discotecas de la ciudad, todo lo que necesita para unas divertidas vacaciones. Comience su día con un suntuoso desayuno con langosta en The Office, donde podrá disfrutar de un fresco jugo de papaya mientras entierra sus pies en la arena. Luego, haga sus ejercicios matutinos remando en un kayak sobre las aguas más tranquilas de Los Cabos. Después podrá relajarse mientras disfruta de la vista de Land’s End en uno de los lujosos camastros de Nikki Beach. Cuando se pone
el sol, Mango Deck es el mejor lugar para observar y ser observado. Comience su noche con una margarita damiana; dicen por aquí que esta planta nativa de Baja California Sur es afrodisiaca. Y llegar aquí es lo más sencillo: Médano es la playa más accesible de Cabo San Lucas. Puede llegar a pie desde cualquier parte del pueblo o tomar un taxi acuático desde la marina.

CHILENO Y SANTA MARíA
Los tesoros de las bahías Santa María
y Chileno están ocultos en la rocosa costa
de El Corredor, la franja de 33 kilómetros que separa a San José del Cabo de Cabo
San Lucas. Estas playas son para los más aventureros: no hay hoteles, restaurantes y, en algunos casos, ni letreros, pero sus llanas y tranquilas aguas son excelentes para el esnórquel y es un lugar ideal para disfrutar de un picnic en familia, sobre todo los fines de semana. Playa Chileno es la más grande de las dos y cuenta con baños públicos, duchas y palapas. Playa Santa María es
más íntima; una rocosa ensenada ideal para un picnic en pareja entre semana (basta
una toalla, una botella de vino y su media naranja) o para socializar con la población local, ya que esta playita es muy concurrida los fines de semana. Incluso los más chicos pueden bucear con esnórquel cerca de la orilla, pero si se aleja hacia la entrada de
la bahía podrá encontrar peces trompeta, anguilas, peces loro y alguna que otra mantarraya. La pulcritud de esta zona no pasa desapercibida: en el 2013, Playa Chileno recibió la bandera azul, un prestigioso galardón ecológico internacional que premia la protección del medioambiente. Es una de solo cinco playas mexicanas en recibir esta designación.

Barcos de excursiones parten a diario de Cabo San Lucas a las playas Chileno y Santa María. También puede llegar en auto o taxi, ya que están a poca distancia de San José del Cabo y Cabo San Lucas. Si viene de Cabo San Lucas, fíjese en los letreros de Santa María en el kilómetro 11, al pasar el puente y antes de la parada de autobús. La salida
a Playa Chileno queda más adelante, en el kilómetro 15; siga la curva cerrada hacia el camino de tierra. Ambas playas cuentan con estacionamiento con vigilancia.

PALMILLA
Arenas doradas, aguas cristalinas y una curvatura de ancho perfecto hacen de esta playa una reina de belleza natural. Pese a
ser sede del resort Palmilla, esta playa está abierta para todos. Si sus pies anhelan una larga caminata, complázcalos aquí mientras pasea y observa a los pescadores con pangas repletas de dorados, niños que persiguen cangrejos en los charcos de marea y un antiguo dique maltratado por el tiempo. Aquí no hallará sombra, pero las aguas clarísimas y la suave arena son suficientes para no poder resistirse a un chapuzón. Durante el invierno, Palmilla es uno de los mejores lugares para observar la migración anual de ballenas; traiga sus binoculares, clave la vista en el horizonte y deléitese con el espectáculo natural desde su toalla de playa. Para llegar, entre a la lujosa comunidad de Palmilla, en el kilómetro 27,5, y siga el camino hacia la costa a su mano izquierda.

COSTA AZUL
Hay motivos por los que Los Cabos es
un destino para surfistas, y este cuarteto de playitas en la bahía Costa Azul es una de las razones principales. Las olas de Acapulquito, Zippers, Pescadito y The Rock son la base
de operaciones de la comunidad local de surfistas. Con sus fondos arenosos y olas que rompen hacia la derecha, Zippers y The Rock son solo para los expertos.

Los principiantes pueden aprender de los expertos en la Escuela de Surf de Mike Doyle en Acapulquito o Pescaditos. Quienes no practican este deporte pueden observar desde la playa, un amplio arenal al pie de
las pendientes que llevan a la carretera principal, o desde la terraza de Zipper’s, un clásico restaurante playero de hamburguesas.

Llegar a Costa Azul solo le tomará un corto viaje desde el centro de San José del Cabo. Sencillamente doble a la izquierda cuando vea el letrero del hotel Cabo Surf.

CERRITOS
¿Busca una playa para no hacer nada? Ninguna como Cerritos, donde el verano californiano dura el año entero. Surfistas
de cabello rubio y hippies frecuentan esta amplia bahía al pie de un espectacular acantilado. Monte las olas, chapalee cerca
de la orilla o bébase una cerveza en el bar
de surfistas. Para llegar a Cerritos, tome la Autopista 19 al oeste de Cabo San Lucas hasta el kilómetro 66 y baje por el camino de tierra a su izquierda.

CABO PULMO
Cuando Jacques Cousteau bautizó al
mar de Cortés el “acuario del mundo”, seguramente estaba explorando Cabo
Pulmo. Esta salvaje franja de arena blanca
a unos 60 kilómetros de San José del Cabo
se extiende a lo largo de una bahía cuyas aguas color esmeralda están llenas de vida. Póngase la máscara de buceo y sumérjase en este paraíso submarino de anguilas, peces ángel, peces escorpión, tortugas marinas, mantarrayas y delfines. Si bien las familias con chicos mayores podrán disfrutar de la aventura y la vida silvestre, las interminables costas de Cabo Pulmo son perfectas para quienes buscan parajes solitarios. Para llegar a Cabo Pulmo, tome la carretera de Cabo
del Este rumbo al este desde San José del Cabo. Aquí encontrará restaurantes, pero asegúrese de traer dinero en efectivo y de llenar el tanque de gasolina antes de salir.