Mallorca Isla
Mallorca es sinónimo de playas y calas de prestigio mundial, pero también de naturaleza, de golf, de cultura, de deportes náuticos, de diversión' Hay muchos motivos para viajar a este enclave de las Islas Baleares.
Esta isla, con casi 80 kilómetros de distancia de un extremo a otro, sobresale por su diversidad. A lo largo de sus 550 kilómetros de costa encontrará algunas de las calas y arenales más hermosos del Mediterráneo: playas blancas dotadas con todos los servicios conviven con diminutas ensenadas entre pinares y acantilados en el norte.
Sus aguas claras y limpias son ideales para bañarse y para practicar actividades náuticas como submarinismo, windsurf, pesca, vela o incluso surf. Aunque no son los únicos deportes que puede realizar: existen numerosos campos de golf, de diseño cuidado y perfectamente integrados en el entorno, que se adaptan a cualquier nivel.
La naturaleza también tiene un lugar destacado. Cerca del 40 por ciento del territorio está protegido. Con un paisaje marcado por los contrastes, destacan los espacios de la Sierra de Tramuntana, al norte, con picos que superan los 1.400 metros, y el Parque Nacional Marítimo y Terrestre de Cabrera, un conjunto de islas e islotes ubicado a poco más de una hora de navegación.
Cada rincón de Mallorca es una sorpresa agradable. Alquilar un vehículo o hacer excursiones son buenas alternativas para recorrerla. Hay multitud de itinerarios y senderos, tanto por el litoral como por el interior, perfectamente indicados y con paneles informativos, que le permitirán descubrir su diversidad caminando o en bicicleta.
Desde hace siglos, algunos pueblos como Deià, Pollença o Valldemossa, han cautivado a artistas con su pintoresca atmósfera. Actualmente, personajes famosos del mundo de la política, el cine o la moda eligen Mallorca como lugar de vacaciones.
La cultura es uno de los principales elementos de la isla. Durante todo el año se suceden festivales, conciertos, certámenes literarios, exposiciones... El centro cultural lo ocupa la capital, Palma de Mallorca, que destaca por su casco histórico y su divertido ocio nocturno.
Además, la isla está excelentemente comunicada a través del aeropuerto internacional de Son Sant Joan, a ocho kilómetros de Palma, y mediante los barcos y líneas regulares que parten del puerto de Palma y de Alcúdia.