Las costas de Nayarit nos presentan una admirable extensión de parajes playeros. Entre ellos aparecen esparcidos pequeños oasis de densa vegetación tropical, manglares y vegetación de selva baja. Se trata de áreas silvestres donde tienen su morada numerosas especies de mamíferos y aves exóticas. Quienes son aficionados al ecoturismo, el turismo de naturaleza y la observación de la flora y fauna de los sitios que visitan, tienen la diversión garantizada por estos rumbos nayaritas. Por eso resulta tan grato dar paseos por los canales de la zona.

Las playas de Nayarit se prestan para ser descubiertas y disfrutadas con toda la intensidad posible y según los requerimientos de relajación, aventura y descanso de los viajeros. Muchas de estas playas son tan hermosas que dejarán en la memoria de los turistas recuerdos imborrables. Sobresalen de entre las playas nayaritas por su belleza panorámica las que se ubican en los alrededores de San Blas, como por ejemplo las de Aticama, las Islitas, El Rincón, Miramar y La Manzanilla. Todas ellas se encuentran enmarcadas en la magnífica Bahía de Matanchén, con sus gratos paisajes y entorno perfecto para la pesca deportiva, el surfing y muchos otros deportes náuticos.

Al sur de las playas mencionadas se encuentra Bahía de Banderas, con otros magníficos rincones costeros como El Anclote, Destiladeras, Bucerías y Cruz de Huanacaxtle. Pero el litoral nayarita también ostenta playas de gran valor ecológico, como Chila y Platanitos, las cuales están rodeadas de una densa y siempre verde vegetación y que destacan como importantes lugares de anidación para las tortugas blanca y de carey.

Los muchos atractivos de Playa Manzanilla
Playa Manzanilla se ubica a 500 metros de Miramar. Cuenta con una extensión de aproximadamente 200 metros de largo por 15 de ancho. Tiene una arena de textura media, de tonalidad gris claro, con varias zonas de piedras pulidas por el roce del mar, oleaje apacible y aguas de color azul-esmeralda. A unos veinte metros de Playa La Manzanilla está la desembocadura de un irresistible arroyo en donde se cultivan camarones de agua dulce. Por todo el trayecto los visitantes hallarán bungalows, zonas para casas rodantes, espacios para acampar y rústicos restaurantes.

A sólo 9 kilómetros de la comunidad de Santa Cruz se encuentra la cascada de El Salto, aunque acceder a este paraje requiere el apoyo de un guía. También hay que atravesar un camino sin pavimentar, ya sea a caballo o caminando. En realidad se trata de tres cascadas, cuya caída principal tiene 30 metros de altura que desembocan en un estanque de roca basáltica circular de unos 16 metros de diámetro, en un entorno de gran encanto ecoturístico.

Playa Manzanilla y Cruz de Huanacaxtle
La principal referencia turística en las cercanías de Playa Manzanilla es Cruz de Huanacaxtle. Se trata de una villa de pescadores que paulatinamente se ha modernizado, en especial por la construcción de la Marina Riviera Nayarit, la más relevante y vasta de los alrededores. Es un proyecto que ha permitido la armonización del estilo de vida tradicional de una comunidad mexicana, con lo más moderno y sofisticado de una instalación como la mencionada marina. Los turistas que viajen a las playas de Nayarit y gocen de lugares como La Manzanilla, posteriormente pueden visitar Cruz de Huanacaxtle o La Cruz, como le llaman los lugareños, para conocer el modo de vida de los habitantes de la comunidad, por ejemplo, el modo en el que pescan y preparan sus capturas en deliciosos platillos típicos.