Si bien, es cierto que al entrar el otoño llega con él la nostalgia de las hojas caídas, menor es la cantidad de luz, en fin, todo lo que sugiere la próxima llegada invernal, trayendo el fin de un ciclo.

Sin embargo no es motivo de desánimo, ya que España cuenta con los 8 lugares naturales más relajantes (entre ellos: bosques, parques, jardines, etc.) una invitación a todos los viajeros que disfruten del silencio y de una gama de colores extensa donde sobresalen los ocres.

1. Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, Huesca

• Es considerado como patrimonio de la humanidad, comparte su territorio con Francia. En la parte española se encuentra en la comarca de Sobrarbe, Huesca, Aragón.


• Visita obligada a la cascada Cola de Caballo ideal para comer al amparo de la cascada, bajo la inmensa presencia de los 3.350 metros del Monte Perdido.


• Recorridos clásicos: Porr el río Arazas en su camino se recrea formando hermosos itinerarios como Faja de las Flores, Bosque de las Hayas, Camino del Soaso, Faja de Pelay, Senda de los Cazadores... Para contemplar la naturaleza al máximo.

2. Fagedad' en Jordà, Girona

• Es una de las 26 reservas naturales del Parque Natural en la zona volcánica de la Garrotxa.


• Crece a 550 m de altitud con una zona plana que da a los laterales del volcán Croscat (en los municipios Santa Pau, Olot y Les Preses)


• Cuenta con señalización en todo el lugar para disfrutar de una agradable caminata.

3. Hayedo de Tejera Negra, Guadalajara

• En el Hayedo existen 2 rutas circulares, señalizadas con paneles interpretativos y balizas, para realizar a pie, y que son: la Senda de Carretas (6 Km.) y la Senda del Robledal ( 17 Km. con posibilidad de enlazarla y continuar por la de Carretas).


• Existe una ruta circular señalizada para bicicletas que llega al Rio Zarzas (21 Km).


• Cuenta con alojamiento cercano, como La Senda de los Caracoles que, aunque se encuentra en la provincia de Segovia, está a un paso del Parque

Después de todo siempre es bueno salir a despejarse, agarrar la cámara y retratar todo lo que la naturaleza tiene para mostrarnos, más allá de la estación del año.