La hermosura natural de la región destaca por la mezcla que nos ofrece de montañas y terreno desértico, pero no se engañen por ello: es el entorno en el que se oculta un santuario de vida submarina variada y fascinante.

En lo que sigue comentaremos qué es lo que hace tan especial e imperdible a Bahía de Los Ángeles, en el estado de Baja California.

Con tan sólo llegar al sitio que les comentamos, desde la carretera transpeninsular, los visitantes tienen una sobrecogedora experiencia por los paisajes que se exponen ante su mirada. Estamos ante uno de los lugares más impresionantes en la región central del Mar de Cortés. El referente principal que domina el horizonte es la Isla Ángel de la Guarda, la segunda de mayor tamaño en el Golfo de California sólo por detrás de la Isla Tiburón. Pero además hay un conglomerado de islas e islotes que aparecen esparcidos por toda el área de la bahía.

Es en este marco que surgen lugares como la Isla Coronado o Smith, con su cono volcánico de medio kilómetro de altura, e islotes imperdibles para fines de ecoturismo como Calavera, Piojo, Pata, Bota, Jorobado, Flecha, Llave, Cerraja, Ventana, Cabeza de Caballo y Los Gemelos. La mayoría de estas pequeñas ínsulas pueden admirarse desde la carretera, antes de llegar a la comunidad.

La presencia de islotes y cañones subacuáticos producen intensas corrientes marinas, en un entorno de rica biodiversidad que desde hace décadas ha motivado el interés de científicos llegados de todas partes del mundo. Ciertamente pocos lugares en el ámbito del Golfo de California son tan generosos en especies de flora y fauna como Bahía de Los Ángeles. En ocasiones es posible avistar al impresionante tiburón ballena en las aguas de este rincón bajacaliforniano. Es una criatura submarina inofensiva para los humanos, puesto que sólo se alimentan de plancton, mismo que filtran a través de su boca colosal.

Pero, además, los aficionados al ecoturismo también podrán admirar en las profundas aguas de Bahía de Los Ángeles animales como delfines y lobos marinos, por eso es un oasis para quienes gustan del submarinismo, por ejemplo, a través del buceo y el esnórquel. Por lo demás en Bahía de Los Ángeles puede admirarse la población de pelícanos pardos más significativa del Golfo de California y también es el hábitat del águila pescadora que acostumbra anidar en los más elevados acantilados de Bahía de Los Ángeles.

Los aficionados al turismo de aventura tienen la diversión garantizada en cada ocasión que visiten el lugar. Se tiene un espacio privilegiado para la navegación en kayak entre el conjunto de islotes en el archipiélago de Bahía de Los Ángeles. En la mencionada Isla Coronado se pueden montar campamentos y admirar la gran laguna que se colma en periodos de marea alta y que se vacía durante la bajamar.

En general, Bahía de Los Ángeles es uno de los mejores lugares en Baja California para disfrutar de la pesca deportiva, ya sea en lanchas con motor fuera de borda o en embarcaciones más grandes. De entre las especies que abundan en estas aguas destacan el dorado, marlín, atún y jurel.

Para proteger su valioso entorno natural los lugareños y organismos dedicados a la conservación silvestre fomentaron el desarrollo del Parque Nacional Bahía de Los Ángeles, una zona protegida que comprende el conjunto de islas y una vasta porción de la bahía. Es un entorno que coadyuva a la regulación de la pesca, el turismo y el ecoturismo en la región. Todo ello sirve de apoyo a la preservación de este sitio mágico del Mar de Cortés. No es de extrañar que en Bahía de Los Ángeles y sus cercanías puedan hallarse numerosos comercios, restaurantes y hoteles.