El cenote Dos Ojos se encuentra en Tulum, en el estado de Quintana Roo.

El curioso nombre que tiene se debe a que está integrado en realidad por dos cenotes que se vinculan entre sí, a través de pequeñas cavernas.

Esta maravilla natural en la Riviera Maya tiene una profundidad que supera los 17 metros y está considerado como uno de los cenotes con cavernas submarinas más largas en el planeta.

Tiene aguas de tonalidad azul turquesa y es el habitat de numerosas especies, todas ellas muy interesantes de contemplar. Además, el cenote Dos Ojos está protegido por un entorno de estalactitas y estalagmitas, excelente para tomar fotografías.

Otro de los detalles destacados de este cenote es que nos ofrece una ilimitada visibilidad, de manera que las personas que nadan allí, tienen la curiosa experiencia como si volaran en el interior de esa oscura bóveda. Por si fuera poco, ciertos orificios que existen en la superficie de la caverna dejan pasar chorros de luz, lo cual forma increíbles reflejos en el agua.

Dos Ojos nos incita a refrescarnos en sus misteriosas aguas, ya que es uno de los cenotes del mundo maya, que más se presta para la práctica del esnórquel y del buceo.

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