Las aguas termales de sangre de Japón están situadas en la ciudad de Beppu y su nombre se debe al característico color de sus nueve manantiales naturales.
A estos fenómenos se los conoce como 'Los infiernos de Japón'. Sin embargo, esta atípica emanación se debe al un alto contenido en hierro, que en contacto con el terreno, tiñen el agua.
Beppu, además, destaca por sus zonas de altas temperaturas, y es que es una de las regiones de actividad geotérmica más importantes del mundo, con el segundo mayor punto de aguas calientes del planeta, después de Yellostone, en Estados Unidos. Este hecho, supone una gran fuente de ingresos, ya que cada año, cientos de turistas visitan este emplazamiento.
Sus espectaculares imágenes proporcionan un aspecto tenebroso, no sólo debido a su color rojo y a la nula posibilidad de ver el fondo del estanque sino que, también, sobre ello, se eleva una densa capa de niebla como resultado del movimiento del vapor de agua, lo que dificulta aún más su visión.