En Chiapas abundan los lugares de gran atractivo ecoturístico.

Uno de ellos es el centro Las  Guacamayas, el cual, por varias razones- entre las que destaca su ubicación preferencial, junto al Río Lacantún-, es uno de los mejores lugares para disfrutar de la naturaleza en el estado de Chiapas. Esta misma corriente marca los límites de la Reserva de la Biósfera de Montes Azules, sitio que ningún explorador de los santuarios ecológicos debe perderse.

El Centro Ecoturístico Las Guacamayas, incluye doce cabañas de diferentes estilos y tamaños, tienda de recuerdos y artesanías, restaurante y un criadero de venados. También existe un área para realizar campamentos en el ejido Reforma Agraria, pueblo vecino donde habitan los fundadores del Centro Las Guacamayas. Toda esta área es sumamente agradable, en especial para los viajeros que pasan la tarde descansando en las hamacas que hay en las cabañas, o bien, para aquellos que nadan en el Río Lacantún, en un ambiente caracterizado por el parloteo alegre de los saraguatos entre la alta fronda.

En Las Guacamayas se pueden disfrutar dinámicas recreativas programadas, como por ejemplo, caminatas para contemplar los nidos que hacen las guacamayas, o desarrollar excursiones náuticas para observar el caudal del Río Lacantún y su hermoso afluente, el Río Tzendales. En estos parajes se tiene la oportunidad de avistar una gran cantidad de aves, monos, y cocodrilos.

Ahora bien, a solo 30 minutos de camino de Las Guacamayas, se encuentra el Centro Ecoturístico Lacandonia. Como el sitio anterior, se localiza en los márgenes del Río Lacantún, precisamente en donde da inicio la Reserva de la Biósfera de Montes Azules. La riqueza ecodiversa de Lacandonia es por lo menos asombrosa. Es un sitio célebre, especialmente, por la gran cantidad y variedad de mariposas que allí habitan. Del otro lado del Lacantún, se ubica la Estación Biológica de Chajul, en donde se realizan profundas investigaciones acerca de la biodiversidad de estas regiones chiapanecas.

El Centro Ecoturístico Lacandonia maneja un atractivo concepto de alojamiento, para aprovechar la cercanía que tiene con el Río Lacantún, y así garantizar una grata experiencia vacacional. Allí se ofrecen en renta cinco cabañas, cada una de ellas con dos camas matrimoniales y baño individual. Este confortable sitio cuenta con restaurante y ofrece paseos por las rutas de esta exuberante selva, así como también, recorridos en lancha de motor, canoa y cayuco a lo largo del Río Lacantún.