Con el paso del tiempo, las actividades de ocio, así como los deportes, se han ido modificando en función de los gustos y estilos que demanda la sociedad.
Actualmente, el factor de riesgo es un atrayente incentivo para practicar todo tipo de originales propuestas en compañía o en solitario.
Debido a este peligro existente una acción más que aconsejable es la de comprobar el equipo antes de ser usado, desde el plegado de los paracaídas hasta la revisión de las ruedas de las bicicletas que van a ser a lanzadas montaña abajo, pasando por la longitud de las cuerdas o las alas de las avionetas.
Otro factor a tener en cuenta es el climatológico. Las altas temperaturas o las abundantes precipitaciones sorprenden cada año a cientos de deportistas, pudiendo provocar, en ocasiones, hasta la muerte. Por ello, a medida que se acerque la fecha es necesario ir observando las predicciones y contemplar la posibilidad de ser anulado si fuese preciso.
El estudio del terreno previamente es una labor que nos aportará una mayor ventaja, especialmente aconsejado para escaladas. Se deben realizar tanto in situ como a través de las posibilidades que nos confieren las nuevas tecnologías, desde mapas por satélite hasta vídeos de otros profesionales que hayan sido filmados en experiencias propias.
Para cada práctica existe una ropa apropiada y diseñada precisamente para nuestra seguridad. No debe ser tomado a la ligera ni hacer un mal uso de ella. Como muestra, las gafas nunca deben ser empleadas directamente, sino que se tiene esperar a que se aclimaten a la temperatura ambiental. Posteriormente, deben permanecer pegadas al rostro con el fin de evitar en lo máximo posible el empañamiento.