Huatulco, donde el hechizo del Océano Pacífico se combina con la hermosura de 36 playas en 9 bahías de cálidas aguas que se pueden navegar en lancha, nos presenta distintas actividades vacacionales y una vasta gama de deportes náuticos.
A finales de la década de 1990 Huatulco fue declarado como zona protegida, por el Parque Nacional de las Bahías de Huatulco.
Además, en las montañas donde se cosecha el café pluma se realizan excursiones por las haciendas cafetaleras en un entorno de orquídeas y ceibas.
Otro aspecto donde se hacen patentes las posibilidades de diversión playera de Huatulco, es el surf. Las costas de Huatulco son perfectas para disfrutar de esta emocionante actividad deportiva. Para su práctica, lo mejor es hacerlo lo más temprano posible puesto que las olas más propicias se presentan justamente en ese periodo del día.
En Huatulco, se puede comprobar que el Océano Pacifico ofrece numerosos privilegios para los aficionados al surf, ya que todavía hay bastantes sitios secretos con las condiciones precisas para que los fanáticos de las olas gocen de un surfing de calidad internacional. Basta un recorrido de una hoja en bote, siguiendo toda la línea costera, para hallar por lo menos una decena de lugares desiertos y únicamente accesibles por vía marítima.
El aire fresco del alba saluda a los aficionados al surf, ya que sean niños, hombres y mujeres. El entorno de Huatulco está definido por las azulosas montañas de la Sierra Madre Sur, en tanto que un sol esplendoroso se levanta sobre el horizonte del mar.
Tras el recorrido llega la recompensa: Olas de más de tres metros de altura de aguas tibias y cristalinas, las cuales forman el “tubo” que tanto buscan quienes se dedican a este deporte acuático. Afirman los conocedores que en Huatulco el surf ofrece una vivencia única, por las olas, de excelent4e tamaño y perfección.
Uno de los lugares en Huatulco que se presta más para divertirse surfeando es Playa Esperanza, la cual se localiza a un kilómetro y medio de La Bahía de Chahué. Se trata de una playa de 110 metros de longitud, engalanada por una exuberante vegetación. Detalles como sus aguas templadas de escasa profundidad e intenso oleaje y el grato clima, nos dan la oportunidad de ejercitarnos con el surf y el wind surf. Este último deporte es una modalidad del surf que incluye una vela.