Aun cuando no es tan famoso como otros balnearios que aparecen en el territorio rochense, La Esmeralda, es un sitio que nadie debe perderse en el marco de un viaje al Uruguay.

Definitivamente La Esmeralda es un lugar que te cautiva, en especial si lo que se busca es un verano apacible y reparador. Senderos para pasear entre densos bosques, más de tres kilómetros de playa, excelentes sitios para la pesca deportiva, sencillas cabañas y almacenes bien surtidos, todo ello hace de este balneario un lugar magnífico para vacacionar en Rocha.

La Esmeralda se define por su rústico y pacífico entorno, aún si se trata de temporada vacacional. No obstante, cuenta con los servicios indispensables para tener un cómodo periodo de asueto. Se encuentra en el Paraje La Angostura, el área donde la distancia entre la Ruta 9 y el mar se hace aún más estrecha.

Localizado en un entorno de gran belleza natural, La Esmeralda es posiblemente uno de los balnearios menos difundidos de la costa de Rocha. Por lo tanto, también es uno de los más recomendables para quienes gustan descanso, agradables playas y un íntimo contacto con la naturaleza. Las condiciones geográficas de la región han favorecido grandemente esta área de Rocha: dunas y zonas de palmeras, se concentran en las inmediaciones del balneario, en un área considerada como “zona de biósfera” por parte de la UNESCO en 1976.

Qué visitar en La Esmeralda

El panorama magnífico de las playas de La Esmeralda es más atrayente aún por lo solitario de su entorno. Inclusive en los meses de mayor intensidad turística las costas de La Esmeralda son poco frecuentadas por el público, al menos comparativamente con otros balnearios del Departamento de Rocha.

Tal es la razón por la cual se le conoce como una “comunidad de pescadores”, puesto que, desde sus orígenes en la década de los cuarenta, ha motivado el disfrute y la contemplación de los espacios silvestres. Proyectada al mar abierto y con sus altos médanos, La Esmeralda es un excelente punto de pesca y además, cuenta con servicio de salvavidas (guardavidas).

Otro de los aspectos atrayentes de La Esmeralda se refiere a sus maravillosos bosques, los cuales se despliegan en un entorno de acacias, pinos, eucaliptos y muchas otras variedades de árboles donde habitan aves innumerables. Un paseo turístico por las rústicas calles del balneario- todas ellas poseedoras de curiosos nombres como “Cuarenta Besos”, “La Cruz del Sur”, “La Siesta” o “La Buena Vida”- , es por sí mismo, una experiencia memorable, en términos ecoturísticos, sin necesidad de alejarse demasiado de la costa.

Hay senderos peatonales donde se impide el acceso a vehículos, lo cual incrementa las alternativas de goce para los afectos al trekking y otras facetas del ecoturismo. Para quienes tengan el deseo de hacer paseos un poco más prolongados, recomendamos acudir a Laguna Negra, valioso cuerpo de agua que brinda vistas cautivadoras.

Cómo llegar a La Esmeralda

La Esmeralda se localiza en el kilómetro 280.5 de la Ruta 9, justo en el punto denominado como Paraje de La Angostura, donde la distancia entre la ruta y el Atlántico es más estrecha, esto es, de aproximadamente tres kilómetros. La calle La Cruz del Sur nos lleva de la ruta hasta la costa y se perfila como la vía principal de este balneario charrúa, justo donde se concentran sus principales comercios.

Información relevante acerca de La Esmeralda

Es preciso mencionar que, muchos de los servicios turísticos que se precisan para pasar unas vacaciones en La Esmeralda, se tienen disponibles de manera complementaria en Castillos, ciudad localizada a 14 kilómetros de La Esmeralda. Este último cuenta con una ubicación preferencial, a medio camino de Aguas Dulces y Punta del Diablo, otros dos bellos rincones del Uruguay.

Actividades a realizar en La Esmeralda

Tal y como sucede en toda el área de Rocha, la mejor temporada para visitar La Esmeralda, la tenemos en el verano, aunque con una intensidad mucho menor que en los balnearios cercanos. Tal estación es una época espléndida para desarrollar paseos de corte ecoturístico por las inmediaciones silvestres. Los inviernos son bastante fríos en la zona, pero garantizan paz y soledad reconfortante, para quienes precisen tener unas vacaciones con tales características.