La palabra cenote proviene del vocablo maya “dzonot” cuyo significado es, hoyo o abismo.
Se refiere a un pozo de origen natural que se genera en terrenos permeables de tipo calcáreo. La roca caliza de estos fosos colosales, se desprende, y hace visible un colosal espejo de agua. El agua acumulada en los cenotes puede variar de tan solo una capa superficial, a cientos de metros de pura agua dulce. Incluso algunos cenotes se encuentran vinculados a admirables lagos subterráneos. México cuenta con cenotes impresionantes que ningún viajero se debe perder.
De entre los cenotes imperdibles en México, destacan: el Zacatón, en Tamaulipas, el Xtacunbilxunan en Campeche, el gran Cenote Sagrado en Chichen Itzá y en Quintana Roo, el cenote Dos Ojos. Y aunque hay muchos más de ellos, no todos son accesibles a los turistas.
Cenotes Lugares sagrados
Por su impactante proyección y relevancia para la vida comunitaria de los mayas, al tratarse de valiosos depósitos de agua dulce, los cenotes fueron considerados como sagrados para los antiguos mexicanos. Los mayas depositaban ricas ofrendas en el fondo de los cenotes y creían en la existencia de una deidad misteriosa, la serpiente gigante llamada Sukan, que fungía como protectora de estos secretos cuerpos de agua. El cenote Dos Ojos, localizado en un complejo de cavernas al norte de Tulum, incluye 25 entradas, cada una de ellas clasificada como cenote. Por su amplitud, profundidad y complejidad, está reconocido como uno de los diez sistemas de cavernas más impresionantes del orbe.
Historia y naturaleza
Los cenotes son lugares de gran valor turístico, porque conjugan en sí, una naturaleza impresionante y mucha historia y tradiciones. Por ejemplo, el cenote del Jaguar, ubicado en Quintana Roo, cuenta con una profundidad superior a los 30 metros. Por su proximidad con el mar, tiene agua salada en su fondo. Le debe su nombre a la curiosa forma de su bóveda, que sugiere la figura de un jaguar, incluso con dos agujeros que semejan un par de felinos ojos.
Además, los cenotes son un gran atractivo para quienes gustan del buceo. Adentrarse en sus profundidades cavernosas, buceando, es una experiencia única y fascinante. Ciertos cebotes tienen una agua tan pura y cristalina, que quienes allí han buceado, relatan que en cierto momento han olvidado que estaban sumergidos, experimentando la sensación se flotar en el aire. Sin embargo, no todos los turistas pueden bucear en los cenotes de México, sino solo aquellos expertos en el deporte del buceo y además, siempre en compañía de un guía experto.