Viajar a Zipolite, pasar unas vacaciones en Zipolite, enamorarse en este paraíso del Pacífico Mexicano, disfrutar una luna de miel o un viaje de placer, en compañía de ese ser tan especial.
Son posibilidades turísticas que difícilmente pueden resistirse. En primer lugar por el natural atractivo de la vivencia amorosa, a continuación porque vacacionar en Oaxaca es una garantía de esparcimiento, cultura y relajación. Finalmente, la oportunidad de visitar
Zipolite, en compañía de nuestra pareja, es una ocasión privilegiada para el contacto directo con parajes costeros de naturaleza exuberante, pletóricos de especies de fauna y flora por demás fascinantes.
Pero hablar de lugares románticos en Zipolite, es hacerlo acerca de la Riviera Oaxaqueña en general. Por ejemplo, el cercano Puerto Ángel es una diminuta comunidad de pescadores que debe su nombre a una amorosa anécdota: hace mucho tiempo un pequeño se ahogó en una pequeña bahía del lugar y poco después, de acuerdo a lo que refieren las tradiciones locales, un ángel apareció sobre las aguas. Desde esa fecha, se construyó en la playa la escultura de un ángel, misma que actualmente se encuentra en la Capilla del Ángel y cuya celebración acontece el día 3 de octubre, año con año. Ese día los pescadores de Puerto Ángel, Zipolite y otras comunidades cercanas, parten en sus embarcaciones para participar en esa conmemoración popular.
Los enamorados encontrarán de gran interés, además, las playas más importantes de Puerto Ángel, como lo son, Playa El Panteón y Playa Principal. La primera es llamada de tal manera, por su cercanía con el panteón del municipio. Se trata de una playa caracterizada por un tranquilo oleaje, excelente para degustar mariscos y pescado fresco y también para contratar entretenidas excursiones de esnorquel. Por si fuera poco, en el período de noviembre a mayo, se pueden avistar ballenas en estas regiones del Océano Pacífico.
Puerto Ángel y Zipolite son destinos turísticos recomendables para disfrutar de un viaje de bodas o una despedida de soltero de primer nivel. Zipolite cobró inmensa fama desde la década de los sesenta del siglo veinte. Y si bien por aquel entonces solía ser más nudista de lo que hoy se manifiesta, se puede gozar como una playa hermosa a mar abierto, a la cual se llega siguiendo un andador peatonal. En Zipolite los novios, esposos o parejas en proceso de conocerse a plenitud, pueden alojarse en algunos hoteles encantadores, rústicos y bohemios, frecuentados principalmente por turistas provenientes de Europa.
Cerca de Zipolite, aparece Playa del Amor, otra opción para quienes practican el nudismo. Allí hay un par de restaurantes de mística proyección que se disfrutan más al acudir de noche, puesto que entonces se puede cenar románticamente bajo el esplendoroso firmamento estelar. Recomendamos degustar en estos locales de Playa del Amor, un pescado a la parrilla o bien pizza al horno.