Guerrero es un estado muy admirado en todo el mundo por sus espectaculares playas y la gran infraestructura turística construida en torno a ellas. Pero aún quedan en ciertas zonas costeras guerrerenses playas casi vírgenes que aguardan recibir a los visitantes nacionales y extranjeros para ofrecerles sus tropicales encantos. Ese es el caso de
Playa La Barrita, una auténtica joya turística del Pacífico Mexicano que merece ser disfrutada al máximo.
Localizada en el municipio de
Petatlán,
Playa La Barrita es un aislado paraíso donde las personas que van camino a
Ixtapa o Zihuatanejo gozan de una playa sumamente exclusiva para quienes acuden a ella. En la comunidad habitan unas 60 personas las cuales son amables y serviciales con los turistas, ofreciendo a precios muy accesibles ricos platillos del mar preparados con mariscos y pescado.
En
La Barrita y otras estupendas playas de
Petatlán con frecuencia se organizan grandes certámenes de surfing por su intenso oleaje. Los vacacionistas disfrutan mucho visitar estos rumbos guerrerenses por sus bellos paisajes y la estupenda gastronomía que allí se cultiva. El nombre que tiene este municipio surge de las palabras náhuatl “petatl” y “tlán”, es decir, petate y junto, por lo cual el nombre significaría cerca del petate. Ese mismo nombre es el que tiene la cabecera municipal, ciudad de unos 20 mil personas.
Tal y como sucede en muchos otros lugares de interés en el
Estado de Guerrero, una notable pureza silvestre se combina con edificios históricos de gran interés. Como sucede en el caso de
La Barrita y otras formidables playas del municipio, muchas de ellas se encuentran relacionadas con antiguas leyendas que estimulan la imaginación de turistas y lugareños. Ese es el caso justamente de la iglesia del Padre de Jesús en Petatlán. Dentro de este edificio sacro hay una escultura de Jesucristo que, de acuerdo a lo que se cuenta en el entorno del municipio, surgió en las circunstancias más sorprendentes. Hoy en día la escultura en cuestión está considerada como sumamente milagrosa.
Esta iglesia se encuentra en el zócalo de Petatalán, donde aunado a gozar de esta histórica plaza, de su pintoresco kiosco protegido por la vegetación, se tiene la oportunidad de conocer edificios de mucho interés, como la Casa de la Cultura y el Ayuntamiento Municipal.
Paseando por sus calles más representativas, los visitantes hallarán el mercado de productos de oro, mismo que maneja precios muy accesibles. Tanto en
Petatlán como en
Playa La Barrita y otros sitios de la zona se pueden saborear estupendos platillos, como los tamales de chivo, preparados con hoja de plátano y otras especialidades cocinadas con la sal que se consigue en los Esteros Las Salinas.
Definitivamente para quienes gusten de saborear los mejores mariscos y pescados, la mejor alternativa es visitar
Playa La Barrita y la cercana
Barra de Potosí para saborear ostiones, así como también en la Laguna Estero Valentín. En este último sitio se preparan ostiones frescos de acuerdo a variadas recetas locales. Todos los lugares antes mencionados están dotados de silvestres paisajes de excepcional belleza. Pero además en las cercanías de
La Barrita se encuentra el yacimiento prehispánico de la Soledad de Maciel, donde se pueden admirar diferentes petrograbados, adoratorios y ofrendas de gran importancia histórica y antropológica.
Por último conviene mencionar la celebración típica más importante del municipio de
Petatlán, las festividades de Semana Santa. A final de cuentas
Petatlán es un formidable sitio del territorio guerrerense que tiene atractivos tan imperdibles como las
playas Cayacal, La Burrita, El Mirador, Juluchuca, Valentín, Barra de Potosí y especialmente
La Barrita.
Para los aficionados al ecoturismo conviene saber que en las zonas boscosas de la región hay diferentes arroyos que en temporadas de lluvia incrementan su caudal, creando preciosas cascadas que ningún visitante ya sea nacional o extranjero se debe perder. Les recomendamos ampliamente conocer playa
La Barrita y en general todo el municipio de
Petatlán.