Una rústica belleza caracteriza las playas de Puerto Escondido, donde la naturaleza nos ofrece un festivo estallido de colores y sonidos.
Durante el siglo XIX, el paradisíaco Puerto Ángel, Oaxaca, fue un importante muelle donde se cargaban barcos con café y madera. Sin embargo, nuevos caminos terrestres que enlazaban a Salina Cruz con Oaxaca, hicieron que este sitio cayera en el sueño del olvido. Sólo unos cuantos se atrevían a cruzar los largos y a veces maltrechos caminos que llevaban a este solitario lugar. La recompensa valía la pena: extensas playas de arena tersa y dorada, aguas cristalinas de color esmeralda y azul turquesa ofrecían la complicidad que se requiere para sentir, con toda la piel, la brisa del mar. Fue así como Zipolite, una de las playas más conocidas de Puerto Ángel, se convirtió en la playa nudista más famosa de México.
Al igual que los destinos vecinos Puerto Escondido y Bahías de Huatulco, Puerto Ángel es un sitio ideal si tu objetivo es acercarte a la naturaleza. Desde el pueblo, ubicado en la Playa Principal o Del Muelle, puedes optar por diversos recorridos hacia parajes de increíble belleza: La laguna de Ventanilla, donde podrás disfrutar un excelente tour de observación de aves; las cristalinas aguas del manantial El Paraíso, para quienes quieran darse un buen chapuzón en aguas dulces, o un paseo en lancha hacia las playas vecinas, donde se puede bucear y esnorquelear.
Son varias las playas que conforman Puerto Ángel donde se pueden practicar actividades acuáticas o simplemente tomar el sol. En el centro del pueblo, además de la Playa Principal o Del Muelle, se encuentra Playa del Panteón, de oleaje suave. Hacia el este, se encuentran las playas de Estacahuite, La Mina, La Boquilla y La Tijera. Ésta última es sitio de gran interés para quienes practican buceo. Hacia el oeste, se encuentran Zipolite, San Agustinillo y Mazunte, donde se ubica el Centro Mexicano de la Tortuga, y Playa Ventanilla.
Si bien Zipolite es una de las playas más concurridas, especialmente por europeos, es una playa de oleaje alto, que incluso resulta atractivo para los surfistas, pero implica cierto riesgo si quieres nadar. Sin embargo, muy cerca se encuentra uno de los sitios más tranquilos de Puerto Ángel: la Playa del Amor, donde la calma y el oleaje tranquilo invitan a la paz.