Razones por las que debes visitar Venecia

Venecia realmente es un conjunto de 120 islas, en menos 8 km cuadrados.

La ciudad está ubicada en una laguna de poco fondo, y está, literalmente, ganada al mar a base de duros cimientos de piedra y el esfuerzo de grandes obreros y arquitectos que luchan desde la antigüedad porque el mar no recupere lo que es suyo, manteniendo a flote la ciudad.

Considerada como una de las ciudades más románticas que existen, y uno de los lugares más visitados de Italia, Venecia es un laberinto de callejuelas empedradas, canales de oscuras aguas, iglesias y preciosos edificios góticos. Un lugar donde ningún coche puede circular, por lo que sus habitantes han aprendido a moverse en barcazas, góndolas y lanchas motoras. Un bello lugar que la niebla y el agua se esfuerzan por devorar en muchas ocasiones, pero donde el sol brilla otorgándole una majestuosidad única en el mundo.

Así es Venecia, una ciudad mágica que debe ser visitada si se tiene la ocasión. La ciudad se divide en varios distritos: San Marco, San Polo, Castello, Dorsoduro, Cannaregio y Santa Croce.

San Marco
El distrito de San Marco es el más visitado y apreciado de Venecia, debido a que contiene algunos de los más importantes y emblemáticos edificios de la ciudad. El centro de este distrito es la famosa Plaza de San Marcos, la más grande de la ciudad, y una de las más bonitas del mundo. La Plaza de San Marcos es un bello y amplio lugar, con varios cafés y restaurantes con música en directo, de vida animada y mucho trasiego de peatones. Si el presupuesto del viajero es alto, no se debe dudar en visitar el café Florian, uno de los más antiguos de la ciudad.

En la Plaza de San Marcos se encuentra la famosa basílica del mismo nombre, donde reposa el cuerpo del santo. De belleza incomparable gracias a sus frescos, sus mosaicos y los adornos dorados que predominan en toda la catedral, este lugar es una visita obligada.


También esta plaza alberga el mítico Campanile, el edificio más alto de la ciudad. Antaño era mitad faro y mitad campanario que anunciaba los eventos más importantes a los venecianos con el tañido de sus 5 campanas. Hoy en día es de un excelente mirador desde el que se puede ver la ciudad al completo. Otro de los atractivos de la Plaza de San Marcos es la Torre dell'Orologio, cuyo reloj exhibe cada hora una pequeña procesión de Reyes Magos presididos por un ángel, durante la Epifanía y la Ascensión.

Pero sin duda, el lugar más impresionante de esta conocida plaza, es el Palacio Ducal, hoy en día un museo, que nos trasportará directamente a la época de máximo esplendor de la ciudad, mientras recorremos sus salas. La misma visita al Palacio Ducal nos permitirá recorrer el legendario Puente de los Suspiros, que comunica con los tétricos calabozos del palacio.

Una de las curiosidades de esta zona es el fenómeno del 'Aqcua Alta'. Al ser la Plaza de San Marcos la zona más baja de la ciudad, el agua de la laguna la inunda varias veces al año, cuando sube. En ese momento, el suelo de la plaza se llena de agua y se extienden varias planchas de madera para que los turistas puedan seguir pasando.


San Polo y Castello
Atravesando el Gran Canal, que divide la ciudad en dos, por el famoso Puente Rialto, el más antiguo de Venecia, llegamos al distrito de San Polo, famoso por ser la zona comercial de la ciudad desde 1097. Las pequeñas tiendas y comercios recibirán al visitante nada más descender por el Rialto. Este distrito asombra por el encanto natural que parece emanar desde todos sus edificios y callejuelas. En esta zona es importante visitar Santa María Gloriosa dei Frari, una iglesia repleta de esculturas y obras de arte en su interior; y la famosa Scuola Grande di San Rocco, uno de los edificios mejor decorados de la ciudad, con una importante colección pictórica en su interior.

Desde San Marco también podemos llegar hasta el distrito del Castello, llamado así por el castillo construido en la zona durante el imperio romano. Este distrito es más humilde que los otros, ya que estaba ocupado por el Arsenale, el gran astillero de la ciudad, por lo que las viviendas eran menos fastuosas que en el resto de Venecia. De esta zona, el visitante no debe perderse el mismo Arsenale, el Museo Naval, o la magnífica Basílica de Santi Giovanni e Paolo, la iglesia más grande de la ciudad.


Dorsoduro, Cannaregio y Santa Croce
Dorsoduro recibe este nombre debido a que es la parte más alta de la ciudad, y la que posee una superficie más estable que el resto. En esta animada zona se hallan todos los edificios de la universidad.

Entre los lugares más importantes, destacan la Galería de la Academia, con una excelente e interesante colección de obras de arte; la iglesia de Santa María della Salute, que luce la famosa cúpula que aparece en casi todas las fotografías de la ciudad; el palacete Ca' Rezzonico, de bella decoración y con un interesante museo en su interior; y el pequeño palacete de Ca' d'Oro, con su característica y bien trabajada fachada principal.

Cannaregio y Santa Croce están entre los lugares menos visitados de Venecia, debido a que son más residenciales y carecen de tantos lugares de interés como los distritos anteriores. En Cannaregio encontraremos el antiguo gueto judío, un lugar que inspira tristeza y melancolía, con varias sinagogas de interés.

Santa Croce es la salida de Venecia por tierra, ya que alberga la estación de tren y de autobuses, además de ser el único lugar de la ciudad por donde pueden circular coches. Se trata del punto final de la visita a la ciudad. Este barrio es mucho más pobre artísticamente hablando que los anteriores, pero desde él se pueden ver muchos palacetes antiguos del Gran Canal.


Qué hacer en Venecia
Para los más románticos, el paseo en góndola es la mejor elección. Aunque pueda resultar caro, es una excelente manera de conocer la ciudad, en el medio de locomoción de la ciudad por excelencia.

Por supuesto, si el visitante acude en las fechas apropiadas, no debe dejar de visitarse el célebre Carnaval de Venecia, único en el mundo gracias a la riqueza de los trajes, todos ellos ambientados en la vestimenta del siglo XVII. Durante los 10 días que dura este carnaval, la ciudad desprende lujo y misterio por todas sus calles. Los personajes enmascarados con las típicas máscaras venecianas, pasean por las tortuosas callejuelas en desfiles organizados o improvisados, dispuestos a fotografiarse con cualquiera que lo desee. Un espectáculo para la vista, sin duda.


Si se dispone de tiempo, se puede visitar las islas más cercanas a Venecia en el vaporetto. Las más conocidas y visitadas son Murano, Burano y Torcello.

Murano es célebre por su excelente cristal, y es allí donde se puede encontrar las mejores piezas de cristal de toda la zona. La isla posee varias tiendas donde se permite observar la técnica del soplado de vidrio, además de un Museo del Vidrio, donde se pueden apreciar interesantes objetos de cristal de la Antigüedad.

La pequeña isla de Burano es conocida por la producción de encaje de hilo, y por sus características casitas de colores. Cerca de ella está la isla de Torcello, más rural y con muchos más lugares de interés cultural, como el Trono de Atila y la Basílica de Santa María dell’Assunta, desde cuyo campanario se pueden obtener unas magníficas vistas de la laguna.
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