Los seris ofrecen al visitante parte de su historia a través de sus artesanías: collares, aretes, adornos de conchas y hermosos cestos tejidos y teñidos en los colores de la región. Además es admirable la manera en que logran finas esculturas representando peces, tortugas y aves marinas, talladas en una dura y pesada madera endémica llamada palo fierro.