En las cristalinas aguas del Caribe mexicano puedes nadar, bucear e incluso acariciar a una especie marina de gran belleza: el tiburón ballena.
La majestuosidad de estos animales y la vastedad del océano nos permiten darnos una idea del lugar del hombre en el planeta.
Estos singulares animales permanecen todo el verano cerca de la misteriosa y agreste isla de Holbox, en Quintana Roo.
Cuando llegas por aire a este paraíso, podrás ver grandes árboles y lagunas habitadas por flamencos, pelícanos y otras aves tropicales.