Si de surfing se trata, Baja California siempre ha tenido una enorme conveniencia para la práctica de este deporte.
La ubicación privilegiada de esta entidad del país, frente a las aguas del Mar de Cortés y el Océano Pacífico, siempre le han dado un enorme encanto y ventajosas condiciones para la práctica de los deportes acuáticos más variados.
Por ejemplo, la isla de Todos Santos, es famosa por contar con las olas más grandes y arriesgadas en el planeta. Los aficionados al surf extremo y en la búsqueda de retos novedosos, acuden a esta playa, solamente recomendable para los deportistas con más experiencia.
Baja California
Para llegar a la isla de Todos Santos se requiere de un bote que se puede rentar en Ensenada. Ahora bien, este último lugar es un destino muy valorado por los surfistas, quienes gozan de montar sobre e internarse dentro de sus impresionantes olas tubulares.
Existen además, zonas de playa donde los vacacionistas acampan para disfrutar de la noche bajacaliforniana: tal es el caso de la playa Salsipuedes y Punta José. La primera es muy bella y la segunda sumamente tranquila.
Colima
También las playas de Colima son muy recomendables para la práctica de los deportes acuáticos. Una de las playas más frecuentadas por los aficionados al surfing y que incluso ha servido como sede de importantes competiciones a nivel internacional es la playa de Boca de Pascual, misma que se localiza en Tecomán.
Las playas de esta zona colimense tienen la singularidad de poseer una arena negruzca de origen volcánico.
Oaxaca
Desde Puerto Escondido se puede llegar a algunas playas que no son tan fáciles de visitar. Una de ellas es
Zicatela.
Es una de las mejores playas del mundo para la práctica del surfing y los especialistas la colocan al nivel de las mejores playas hawaianas, por sus olas de 6 metros de alto y otras cualidades. Zicatela mide 50 metros de ancho y poco más de dos kilómetros de largo.
Nayarit
Una recomendación final para comprender las ventajas que nos ofrecen las playas mexicanas para la práctica del surf, la tenemos al conocer un sitio como
Sayulita, en el estado de Nayarit.
Muchos surfistas visitan esta playa desde la década de los sesenta en el siglo XX, por su agradable clima y la consistencia de sus olas, ventaja que se mantiene a lo largo de todo el año.