La historia mexicana es generosa en interesantes anécdotas acerca de hazañas militares y grandes caudillos, varias de las cuales han surgido de añejas tradiciones orales para llegar a formar parte de los anales oficiales y de los libros de texto utilizados en las escuelas públicas.
No obstante, hay también algunas anécdotas acerca de la lucha insurgente mexicana que han pasado un tanto desapercibidas con el paso de los siglos y que han quedado en el olvido de los habitantes de nuestro país. Te presentamos algunos de esos datos, lo que quizás no sabías de la Independencia de México.
La campana de Dolores no está en Dolores
Actualmente la campana de Dolores puede ser admirada, tras haber sido sometida a una cuidadosa restauración, pero no ya en el campanario de la Parroquia de Nuestra Señora de los Dolores, en el Pueblo Mágico de Dolores Hidalgo, Guanajuato, sino en un nicho colocado sobre el balcón central de Palacio Nacional en el Centro Histórico de la capital mexicana. Es esa campana la que el mandatario en turno debe hacer sonar como parte de la celebración nocturna del 15 de septiembre, evocando aquel llamado insurgente a las armas por parte de Hidalgo.
La batalla más sangrienta en el parque más divertido
Uno de los triunfos clave por parte de las fuerzas independentistas comandadas por Miguel Hidalgo se desarrolló en una zona silvestre en las afueras de la Ciudad de México conocido como Monte de las Cruces. Fue un sangriento combate en el que salió victorioso el ejército encabezado por Abasolo, Aldama y Allende. En la actualidad ese sitio es el conocido parque de La Marquesa (si bien su nombre oficial es Parque Nacional Insurgente), lugar donde las familias acostumbran disfrutar de gratos y apacibles almuerzos campestres.
Los deliciosos Chiles en Nogada
Según cierta tradición las monjas del Convento de Santa Mónica, en Puebla, fueron las que, al saber que el prócer insurgente Iturbide celebraría su cumpleaños por aquellos rumbos, decidieron halagarlo ofreciéndole ese singular platillo cuyos colores evocaban los de la bandera del Ejército Trigarante: rojo, por la granada, verde por el perejil y blanco por la deliciosa salsa de nogada elaborada con nueces de Castilla. Todos ellos son complementos de tradicional platillo preparado con chiles poblanos.
La Guerra de las Vírgenes
Pocos saben que se desarrolló una auténtica guerra de Vírgenes durante el Movimiento Insurgente. Por un lado la Virgen de Guadalupe, cuyo estandarte enarbolaba Hidalgo, la cual en cierto momento fue llamada María Insurgente y por otro el Virrey Venegas combatía llevando un estandarte de la Virgen de los Remedios.