Los aviones tendrán en el futuro unos asientos con los que los pasajeros podrán viajar mucho más tranquilos y relajados.

Volar es muy seguro, lo sabemos. Pero no podemos evitar sentir miedo a hacerlo. Es algo natural y que se escapa a nuestro control. Por suerte, los diseñadores de aviones están trabajando para que en el futuro tengamos menos motivos para sufrir miedo. Es algo que se ha podido comprobar en vivo en la Aircraft Interiors Expo, celebrada hace pocos días en Hamburgo.

Aunque hay quien apuesta por aumentar el espacio disponible para las personas que viajan en clase turista, que son quienes más “enlatados” se suelen sentir, las principales iniciativas vistas en la feria indican que la tendencia en el futuro va a ser totalmente opuesta. Lo que harán los viajeros será arroparse con una mayor serie de posibilidades a nivel de entretenimiento para que se les pueda ir el miedo a volar. Además de reforzar el contenido multimedia también se les proporcionarán nuevas opciones con las que planificar el tiempo que pasarán en el lugar al que se dirijan (lo malo será en el viaje de vuelta, claro está).

Los aviones ofrecerán un entorno en el cual hacer reservas de restaurantes, compra de entradas y planificaciones de rutas para descubrir lugares interesantes que visitar. Con suerte, nos entretendremos lo suficiente como para no pensar en que estamos volando.


Además, se está trabajando en mejores asientos, algunos incluso de categoría premium que no hacen pensar en que nos encontramos en clase económica. Estos asientos tendrán sistema para cargar el teléfono móvil, mejor conexión Wi-Fi, un configurador más dinámico de luz ambiente o más espacio para el reposa brazos. En otros casos los diseños de asiento van a ser aún más avanzados y originales.

Un diseño presentado es más parecido al de los asientos de los trenes, con pequeñas separaciones que proporcionan un mayor nivel de privacidad a los pasajeros. Esto es algo que también encaja en la idea de los diseñadores de aviones de introducirnos en un ambiente más agradable que no nos haga pensar en que estamos volando por el aire sin ningún tipo de control sobre nuestro destino inmediato.

Otro aspecto curioso de asiento es el que dispone de un sistema de gravedad que da la sensación al viajero de estar flotando. No sabemos si esto será algo que pase de la curiosidad, dado que es más que probable que algunos pasajeros no estén muy interesados en sentir que están flotando mientras viajan en avión. Como de costumbre, seguramente solo algunos de estos diseños acabarán utilizándose.

Vía: CNN

Foto: StockSnap