Ya sea en Semana Santa, Fiestas Patrias o algún fin de semana largo, si es que tenemos la oportunidad y el dinero suficiente para salir de viaje lo haremos, aunque muchos se desaniman pensando que en solo tres o cuatro no podrán hacer todo lo que quieren.
Es cierto, tener pocos días nos limita un poco a la hora de escoger las actividades que queremos realizar pero no hay que desalentarnos. Si es que planeamos las cosas con anticipación y hacemos una buena estrategia, puede ser una corta pero productiva escapada.
Estos son siete errores que puedes seguir al momento de elegir tu destino de viaje y armar tu itinerario.
Hospedarte lejos de la acción
Aunque vayas a pagar un poco más por estar en un hotel cerca de las atracciones de la ciudad, valdrá la pena pues podrás ahorrar mucho tiempo en viajes y en transporte. Y este tipo de viajes rápidos, tiempo es lo que menos tendrás para desperdiciar si quieres conocer todo.
Querer hacer mucho en tan poco tiempo
Decide qué es lo que quieres visitar sí o sí durante tu estadía y planea tu día. En vez de ir de un extremo al otro de la ciudad en un día, puedes aprovechar de ver las cosas que están cerca un día y al día siguiente ir al otro extremo para visitar el resto de atractivos.
Reservar vuelos con muchas conexiones
Aunque algunos de los pasajes con conexiones múltiples son un poco más baratos, estarás perdiendo horas sagradas en ir de aeropuerto en aeropuerto o tomando muchos buses. Mejor elige los vuelos directos, pues también te librarás de imprevistos como cancelaciones de vuelos en el trayecto, o si vas por tierra no planees visitar un pueblo a seis horas de la ciudad.
Improvisar
Aunque hay cosas que no se pueden planear con mucha anticipación, como por ejemplo en cuál restaurante reservar una mesa, tampoco es bueno pasear durante una hora por el lugar pensando qué es lo que se nos antoja comer. Improvisar es la manera más fácil de perder el tiempo. Lo que te recomendamos es que un par de horas antes pienses qué es lo que resulta más factible para ti y tus acompañantes o qué se les antoja comer.
Olvidar adecuarte al horario de la ciudad
Este consejo no va dirigido al cambio de horario si viajas de un país a otro sino al modo de vida que tienen los habitantes del lugar. Por ejemplo, si llegas temprano al hotel sal a caminar por la ciudad, a tomar un café o a comer algo pero no te estreses haciendo grandes planes. En cambio, si llegas de noche intenta descansar lo más que puedas durante el viaje para que cuando llegues a tu destino tengas energías para acoplarte a las actividades de los ciudadanos.
Vestirte para una parte del día
No por ahorrar equipaje vas a ir a una cena especial vestido en short y sandalias. Tienes que empacar inteligentemente pensando que una prenda tienes que combinarla de diferentes maneras para lograr atuendos diferentes para cada día. Siempre es bueno que pienses en llevar una muda para salir de noche pero tampoco hay que abusar para no tener que cargar con mucho equipaje.
No mapear el lugar a dónde vas
Hay gente que le gusta viajar sin rumbo alguno y ver dónde los lleva el viento. Pero para viajes de pocos días, es mejor tener una idea de la ciudad a la que vamos a llegar. Mira algunos mapas del lugar y mide la distancia entre el aeropuerto o terminal de buses hasta el hotel y del hotel hacia los lugares que quieres visitar.