Cuando uno piensa en China, tal vez no sea tan frecuente pensar en un crucero para viajar por sus largos ríos.
Lo más seguro es que uno se imagine autobuses y trenes y no tanto un crucero. Pero por más exótico que pudiera parecer, esta clase de viaje sí puede llevarse a cabo y es muy recomendable. Uno de los ríos más atractivos para explorar en crucero es el famoso Yangtzé, el de mayor longitud en el continente asiático y el tercero más largo del planeta, solo detrás del Amazonas y del Nilo.
El río Yangtzé tiene más de 6,300 metros de largo y se extiende hasta el Mar de China. Tradicionalmente se le considera como la frontera entre la parte norte y sur de la nación. Inclusive, más allá de ser un destino de cruceros, el río Yangtzé exhibe una dinámica vida comercial, puesto que en sus orillas se levantan fábricas de toda clase de productos: metalurgia, automóviles, etc.
Como quiera que sea, esta es la ruta que siguen varios cruceros de lujo desde el 2004. Es una oferta turística que fue impulsada por el magnate hotelero suizo, Nicolas Solari. En la actualidad son tres las embarcaciones de esta clase que cruzan las aguas del Yangtzé. Sin duda que se trata de una manera muy sugestiva de conocer lo profundo del territorio chino, el fascinante gigante de Asia.
En esta parte del mundo, las estaciones del año más convenientes para tomar un crucero por el río Yangtzé son la primavera y el otoño, es decir, en los meses de abril, mayo, septiembre y octubre. La razón es que durante este periodo, no se presenta en el ambiente ni mucho calor, ni demasiada humedad y por lo tanto, se percibe una grata frescura. Hay que tomar en cuenta que, durante la temporada alta de visitantes, los precios se elevan considerablemente, así que es necesario reservar.
Otro aspecto a considerar, para el caso de viajar en crucero por el río Yangtzé es si se piensa recorrer el río corriente arriba o bien, corriente abajo. Parece ser que el viaje corriente abajo es más corto y a un precio mayor. Además, del viaje, en este crucero se manejan paquetes turísticos muy interesantes y personalizables de acuerdo a las preferencias de los viajeros, de tal manera que existe la opción de que se recoja a los pasajeros en el hotel y se los conduzca al barco y viceversa, por ejemplo. Estos paseos pueden durar de 7 a 17 días e incluye excursiones a Hong Kong, Xian, Beijing, las Tumbas Ming, el Palacio de Verano y otros sitios fascinantes.